Poco fútbol en el campeonato
Cuando dio inicio al torneo nacional de fútbol, creíamos que todo el torneo iba a tener interés. Por cuanto nos parecía atractivo, la nueva forma de torneo para este año. Pero, luego del interés de la primera etapa, los cuatro equipos clasificados se dejaron estar y, comenzaron a alternar sus equipos, presentando incluso a sus planteles inferiores, como ocurrió con Liga Deportiva Universitaria, el nuevo y flamante campeón de América. O, como el Deportivo Quito, que algunos partidos cumplió con su segundo plantel. Mientras que, Deportivo Cuenca y Nacional, solo han demostrado tener equipos mediocres que, poco o nada pueden aportar en esta segunda etapa.
Ocho equipos estantes, son los que tienen que pelear por los dos cupos adicionales en la liguilla final. Algunos, como los dos elencos ambateños, parece que se pusieron las pilas en uno de los grupos y, continúan peleando palmo a palmo la punta. O, los equipos del Guayas que, algo parecido hacen en el otro sextangular. Pero, qué poca calidad futbolística están demostrando en la cancha. Los partidos son aburridos, en su mayoría o, aquel que pierde, siempre tiene algún pretexto - casi siempre los malos arbitrajes – para justificar sus malas presentaciones. Sin embargo, el aficionado poco comprende, porqué bajó tanto la calidad de su juego.
Desde hace diez años, vivimos creyendo que el fútbol ecuatoriano ha mejorado. Tenemos muchos jugadores como titulares de excelentes equipos de otras partes del mundo y, siguen saliendo nuevos chicos. Pero, ir a los estadios o, mirar a través de la televisión, permite a los aficionados darse cuenta que, algo está pasando en el fútbol nacional, ya que los partidos no despiertan ningún interés especial. ¿Acaso, se dejó de jugar buen fútbol por presión? ¿Acaso, los jugadores se olvidaron de cómo hay que enfrentar un partido? ¿Acaso, los jugadores se creyeron demasiado? ¿Acaso, los directivos no entendieron lo que tienen que hacer para poder armar buenos equipos? En fin, muchas son las preguntas. Lo único cierto es, que en el país, el campeonato está aburrido y con jugadores que no dan la talla pues, les falta calidad.
Veamos lo que ocurre en los dos sextangulares: en el grupo "A", Barcelona, Deportivo Quito, Olmedo y Emelec están en los cuatro primeros puestos, con diferencia de un punto, en ese orden. Pero, los dos restantes, Azogues y Nacional, están al último, al parecer, con diferente destino. Azogues, último en el acumulado y, casi seguro perdedor de la categoría para luego de las restantes seis fechas. Nacional, por el contrario, clasificado y, como no tiene puntos para la liguilla final, no pierde absolutamente nada. Los descontentos, son sus hinchas.
En el grupo "B", Macará y Técnico Universitario, ubicados en el primer lugar, con igual puntaje e igual gol diferencia. Liga a tres puntos de diferencia pero, igualmente ya clasificado. Le siguen a un punto, Universidad Católica y Espoli, aunque con diferencia de goles, en ese orden. El elenco Camarata con posibilidades de acompañar en el descenso al Azogues y, el Espoli, lejos de la punta pero sin peligro de descenso. Y, dos puntos abajo el Deportivo Cuenca que, ya está clasificado y, lo único que puede perder, si continúa ubicado en ese lugar, sería el punto de bonificación para la liguilla final.
Ha transcurrido el 40% de esta etapa y, todavía muy poco se puede hablar de resultados definitivos. Pero, lo único y definitivo es, que a lo largo de esta segunda etapa, muy poco de fútbol con calidad se aprecia en el torneo nacional. ¿Cuándo se podrá encontrar un campeonato que, como en otros países, mantenga el interés para llenar los estadios de fútbol? Confiemos que pronto.
Jorge García Romo
Lic. Prof. 17 - 523
Ocho equipos estantes, son los que tienen que pelear por los dos cupos adicionales en la liguilla final. Algunos, como los dos elencos ambateños, parece que se pusieron las pilas en uno de los grupos y, continúan peleando palmo a palmo la punta. O, los equipos del Guayas que, algo parecido hacen en el otro sextangular. Pero, qué poca calidad futbolística están demostrando en la cancha. Los partidos son aburridos, en su mayoría o, aquel que pierde, siempre tiene algún pretexto - casi siempre los malos arbitrajes – para justificar sus malas presentaciones. Sin embargo, el aficionado poco comprende, porqué bajó tanto la calidad de su juego.
Desde hace diez años, vivimos creyendo que el fútbol ecuatoriano ha mejorado. Tenemos muchos jugadores como titulares de excelentes equipos de otras partes del mundo y, siguen saliendo nuevos chicos. Pero, ir a los estadios o, mirar a través de la televisión, permite a los aficionados darse cuenta que, algo está pasando en el fútbol nacional, ya que los partidos no despiertan ningún interés especial. ¿Acaso, se dejó de jugar buen fútbol por presión? ¿Acaso, los jugadores se olvidaron de cómo hay que enfrentar un partido? ¿Acaso, los jugadores se creyeron demasiado? ¿Acaso, los directivos no entendieron lo que tienen que hacer para poder armar buenos equipos? En fin, muchas son las preguntas. Lo único cierto es, que en el país, el campeonato está aburrido y con jugadores que no dan la talla pues, les falta calidad.
Veamos lo que ocurre en los dos sextangulares: en el grupo "A", Barcelona, Deportivo Quito, Olmedo y Emelec están en los cuatro primeros puestos, con diferencia de un punto, en ese orden. Pero, los dos restantes, Azogues y Nacional, están al último, al parecer, con diferente destino. Azogues, último en el acumulado y, casi seguro perdedor de la categoría para luego de las restantes seis fechas. Nacional, por el contrario, clasificado y, como no tiene puntos para la liguilla final, no pierde absolutamente nada. Los descontentos, son sus hinchas.
En el grupo "B", Macará y Técnico Universitario, ubicados en el primer lugar, con igual puntaje e igual gol diferencia. Liga a tres puntos de diferencia pero, igualmente ya clasificado. Le siguen a un punto, Universidad Católica y Espoli, aunque con diferencia de goles, en ese orden. El elenco Camarata con posibilidades de acompañar en el descenso al Azogues y, el Espoli, lejos de la punta pero sin peligro de descenso. Y, dos puntos abajo el Deportivo Cuenca que, ya está clasificado y, lo único que puede perder, si continúa ubicado en ese lugar, sería el punto de bonificación para la liguilla final.
Ha transcurrido el 40% de esta etapa y, todavía muy poco se puede hablar de resultados definitivos. Pero, lo único y definitivo es, que a lo largo de esta segunda etapa, muy poco de fútbol con calidad se aprecia en el torneo nacional. ¿Cuándo se podrá encontrar un campeonato que, como en otros países, mantenga el interés para llenar los estadios de fútbol? Confiemos que pronto.
Jorge García Romo
Lic. Prof. 17 - 523