Muere hincha violento de River Plate atacado a balazos

Enviado por roberto el Jue, 09/08/2007 - 10:55

Un hincha violento del River Plate argentino murió hoy tras ser atacado a balazos por desconocidos durante la noche del martes en esta capital.


La policía investiga el hecho como un presunto ajuste de cuentas entre grupos ultra de la hinchada riverplatense que han mantenido sangrientos choques en los últimos meses.

Gonzalo Acro, de 29 años, murió en el Hospital Pirovano tras recibir tres disparos de armas de fuego, dos de ellos en la cabeza, mientras caminaba por la calle acompañado por un amigo que también resultó herido, aunque está fuera de peligro.

Tras un encontronazo ocurrido el 11 de febrero pasado en las instalaciones del club entre miembros de la "barra brava", que provocó heridas de armas de fuego y blancas a varias personas, Acro había sido despedido como empleado de River, suspendido como socio y tenía prohibida la entrada al estadio "Monumental".

El ministro de Interior del gobierno argentino, Aníbal Fernández, dijo hoy que sería "una locura" relacionar a River con este asesinato, aunque opinó que el motivo del ataque puede estar vinculado a "dineros secundarios" ligados al fútbol.

"La investigación seguramente nos abrirá algún camino para seguir y encontrar a los responsables sobre este asunto", añadió.

Dirigentes opositores al presidente del club, José María Aguilar, aseguran que éste ha amparado a los hinchas violentos y lo responsabilizan por los graves incidentes ocurridos en los últimos tiempos dentro y fuera de la entidad deportiva.

Los miembros de la "barra brava" recaudan dinero al tener a cargo el aparcamiento de coches en los alrededores del estadio "Monumental", la reventa de entradas para recitales musicales y partidos en ese escenario, según la prensa deportiva de Buenos Aires.

River Plate ha dispuesto para el próximo domingo una amplia operación de seguridad en el estadio, en el que el equipo local debutará en el torneo Apertura 2007 del fútbol argentino ante el Newell's Old Boys.

EFE