La ilusión vuelve a la selección italiana de la mano de Lippi.
El regreso de Marcello Lippi, de 60 años, al banquillo "azzurro" era la única solución que podía devolver la ilusión a una selección nacional hundida en el desánimo tras su eliminación, a manos de España, en los cuartos de final de la Eurocopa.
Un equipo sin chispa, sin juego, y con un solo un gol marcado de jugada en cuatro encuentros, había provocado, incluso durante la competición, los rumores y los deseos de la vuelta de un ganador nato: Marcello Lippi.
Por ello, la oficialidad del regreso de Lippi, que abandonó el cargo de seleccionador por propia voluntad tras ganar el Mundial de Alemania'06, llegó algunas horas después de confirmar que el contrato de Roberto Donadoni quedaba extinguido y no se tenía intención de renovarlo.
Incluso, hoy Donadoni al responder a los periodistas sobre la posible vuelta de Lippi explicó con amargura "que es una posibilidad de la que se habla desde hace dos años".
"La gente quiere a Lippi", escribían hoy los periódicos italianos, que comparaban al ex seleccionador, aún con el aura de campeón, extrovertido y determinado, con el taciturno Donadoni, que no ha calado entre los "tifosi".
Los medios de comunicación italianos ya habían adelantado que el ex seleccionador se entrevistó ayer en Roma con el presidente de la Federación, Giancarlo Abete, con quien llegó a un acuerdo económico.
El nuevo contrato de Lippi será de dos años, justo para el Mundial de Sudáfrica, y ganará dos millones de euros netos anuales, según la prensa.
Marcello Lippi será presentado el próximo 1 de julio durante una rueda de prensa, y aunque el técnico no necesita presentaciones, sí las necesita su nueva Italia.
La prensa italiana ya ha dedicado hoy sus páginas a imaginar cómo será la nueva Italia de Lippi en vistas del Mundial de 2010 de Sudáfrica.
La primera decisión será qué hacer con los llamados "coroneles", aquellos jugadores que han superado los 30 años y que, a pesar de ser actualmente inamovibles, Lippi podría no contar con ellos pensando en 2010.
Según la prensa local, Lippi no tiene intención de volver a contar con Alessandro Del Piero, de 34 años, mientras que la sorpresa podría ser la vuelta de Francesco Totti a la "azzurra".
Totti, muy unido a Lippi, decidió dejar la selección tras la marcha de éste, después de declarar que las lesiones musculares no le permitirían jugar demasiados partidos.
Sin embargo, los expertos aseguran que con la vuelta de Lippi, al capitán del Roma le volvería el gusanillo de jugar en la selección.
Mientras la gran duda que despierta el regreso de Lippi es si confiará en el jugador del Sampdoria Antonio Cassano, con quien no contó para el Mundial de Alemania 06.
Con Lippi, aseguran, empezará la verdadera renovación de la selección italiana, comenzando por la defensa, donde se decidirá el progresivo adiós de jugadores como Cristian Panucci y Marco Materazzi, mientras el único "veterano" con verdaderas posibilidades de llegar a Sudáfrica será Fabio Cannavaro.
Menos cambios se perfilan en el centro del campo, donde Lippi seguirá contando con algunos de sus hombres de confianza como Andrea Pirlo, Genaro Gattuso, Daniele De Rossi y German Mauro Camoranesi.
Asimismo, Lippi confía en la incorporación del nuevo fichaje del Juventus, el brasileño Amauri Carvalho, que durante esta temporada podrá obtener la nacionalidad italiana.
Las primera prueba para la nueva Italia de Lippi será el 20 de agosto en Niza contra Austria, un partido amistoso que se jugará entre la fase previa de la Liga de Campeones y la final de la Supercopa italiana.
Aunque muchos entrenadores han ganado más trofeos, ninguno como Lippi puede contar con un currículum tan completo. El técnico italiano ha ganado un mundial, cinco títulos de liga, una Liga de Campeones, una Copa Intercontinental, una Supercopa europea, una Copa de Italia y 4 Supercopas italianas.
Lippi, nació en la localidad toscana de Viareggio el 11 de abril de 1948, y es tras una carrera discreta como jugador (Savona, Sampdoria, Pistoiese), comenzó una brillante como técnico que coronó en el banquillo del Juventus.
EFE.
Un equipo sin chispa, sin juego, y con un solo un gol marcado de jugada en cuatro encuentros, había provocado, incluso durante la competición, los rumores y los deseos de la vuelta de un ganador nato: Marcello Lippi.
Por ello, la oficialidad del regreso de Lippi, que abandonó el cargo de seleccionador por propia voluntad tras ganar el Mundial de Alemania'06, llegó algunas horas después de confirmar que el contrato de Roberto Donadoni quedaba extinguido y no se tenía intención de renovarlo.
Incluso, hoy Donadoni al responder a los periodistas sobre la posible vuelta de Lippi explicó con amargura "que es una posibilidad de la que se habla desde hace dos años".
"La gente quiere a Lippi", escribían hoy los periódicos italianos, que comparaban al ex seleccionador, aún con el aura de campeón, extrovertido y determinado, con el taciturno Donadoni, que no ha calado entre los "tifosi".
Los medios de comunicación italianos ya habían adelantado que el ex seleccionador se entrevistó ayer en Roma con el presidente de la Federación, Giancarlo Abete, con quien llegó a un acuerdo económico.
El nuevo contrato de Lippi será de dos años, justo para el Mundial de Sudáfrica, y ganará dos millones de euros netos anuales, según la prensa.
Marcello Lippi será presentado el próximo 1 de julio durante una rueda de prensa, y aunque el técnico no necesita presentaciones, sí las necesita su nueva Italia.
La prensa italiana ya ha dedicado hoy sus páginas a imaginar cómo será la nueva Italia de Lippi en vistas del Mundial de 2010 de Sudáfrica.
La primera decisión será qué hacer con los llamados "coroneles", aquellos jugadores que han superado los 30 años y que, a pesar de ser actualmente inamovibles, Lippi podría no contar con ellos pensando en 2010.
Según la prensa local, Lippi no tiene intención de volver a contar con Alessandro Del Piero, de 34 años, mientras que la sorpresa podría ser la vuelta de Francesco Totti a la "azzurra".
Totti, muy unido a Lippi, decidió dejar la selección tras la marcha de éste, después de declarar que las lesiones musculares no le permitirían jugar demasiados partidos.
Sin embargo, los expertos aseguran que con la vuelta de Lippi, al capitán del Roma le volvería el gusanillo de jugar en la selección.
Mientras la gran duda que despierta el regreso de Lippi es si confiará en el jugador del Sampdoria Antonio Cassano, con quien no contó para el Mundial de Alemania 06.
Con Lippi, aseguran, empezará la verdadera renovación de la selección italiana, comenzando por la defensa, donde se decidirá el progresivo adiós de jugadores como Cristian Panucci y Marco Materazzi, mientras el único "veterano" con verdaderas posibilidades de llegar a Sudáfrica será Fabio Cannavaro.
Menos cambios se perfilan en el centro del campo, donde Lippi seguirá contando con algunos de sus hombres de confianza como Andrea Pirlo, Genaro Gattuso, Daniele De Rossi y German Mauro Camoranesi.
Asimismo, Lippi confía en la incorporación del nuevo fichaje del Juventus, el brasileño Amauri Carvalho, que durante esta temporada podrá obtener la nacionalidad italiana.
Las primera prueba para la nueva Italia de Lippi será el 20 de agosto en Niza contra Austria, un partido amistoso que se jugará entre la fase previa de la Liga de Campeones y la final de la Supercopa italiana.
Aunque muchos entrenadores han ganado más trofeos, ninguno como Lippi puede contar con un currículum tan completo. El técnico italiano ha ganado un mundial, cinco títulos de liga, una Liga de Campeones, una Copa Intercontinental, una Supercopa europea, una Copa de Italia y 4 Supercopas italianas.
Lippi, nació en la localidad toscana de Viareggio el 11 de abril de 1948, y es tras una carrera discreta como jugador (Savona, Sampdoria, Pistoiese), comenzó una brillante como técnico que coronó en el banquillo del Juventus.
EFE.