¿Los Clásicos del Fútbol?

Enviado por carlosefrain el Dom, 11/05/2008 - 15:02
Con el objeto de analizar ¿qué es un clásico en el fútbol?, lo más importante es conocer qué es en realidad. Muchos son los conceptos del término castellano, pero sobre aspectos que nada tienen que ver con lo que nosotros queremos comentar. Refiriéndose al deporte, se dice que, "el clásico es un partido de rivalidad, entre dos clubes o selecciones históricas o, entre equipos pertenecientes a una misma ciudad o región".

Con estos antecedentes, comentemos que es lo que nosotros vemos cada vez que, se enfrentan distintos equipos durante el campeonato ecuatoriano de fútbol. Sin ninguna duda, el llamado "Clásico del Astillero", entre Barcelona y Emelec, ambos de la ciudad de Guayaquil, es el de mayor trascendencia en el país. Primero, porque en él, participa el equipo de mayor hinchada, como es el equipo amarillo (antes amarillo, negro y rojo) y, su tradicional rival, el Emelec. Pero, se escucha mucho, sobre todo en emisoras y canales de televisión que, no puede existir ningún otro clásico. (?)

Yo me pregunto, ¿acaso no fue durante largo tiempo el "súper clásico del fútbol capitalino" el enfrentamiento entre Liga Deportiva Universitaria y el Aucas, hoy militando en la segunda categoría? ¿Acaso no se puede llamar clásico al enfrentamiento de Nacional y del Espoli, como representantes de las fuerzas del orden en el país? O, lo mismo, el antes muy destacado "clásico ambateño".

Yo creo que sí, lo importante es que no se salga de la definición que hemos anotado al comienzo del comentario. En Argentina, poniendo de ejemplo, cada partido en el que participan los principales planteles del campeonato nacional de ese país, se llaman clásicos. Allí, la televisión trasmite en directo, dos "clásicos" por semana. ¿Porqué entonces, dejar a un lado, lo que dice la Academia de la Lengua"? No seamos "más papistas que el Papa".

EL ÚLTIMO CLÁSICO JUGADO EN EL PAÍS

Un día antes del Día de la Madre, se jugó en la cancha del Barcelona, el último clásico jugado por los dos equipos de Puerto principal. Casi lleno hasta la bandera (como se diría en el ambiente taurino). Una noche agradable. Emoción en todo momento. Errores arbítrales, como de costumbre. Tiros penales no cobrados. Palazos que ponían los nervios de punta a los aficionados. Jugadas espectaculares de ambos lados. Juego de ida y vuelta. Para varios hinchas fue mejor o jugó mejor su equipo. Expulsados, nada raro. Y, al final, la única parte lamentable, que el marcador terminó a cero y, no se pudo ver un gol, que es la verdad del fútbol. Como ven ustedes, que fácil es comentar un partido así. Pero para ello, debe ser un verdadero clásico.

Jorge García Romo
Lic. Prof. 17 - 523