David Beckham, nueva estrella del Galaxy de Los Angeles, ha comenzado su etapa en la Liga Profesional de Fútbol (MLS) estadounidense con mala suerte, pues no va a poder debutar mañana, sábado, debido a una lesión en el tobillo izquierdo.

Beckham, que acudió como espectador al Partido de las Estrellas de la MLS, disputado la pasada noche en Commerce City (Colorado), la sede del equipo local de los Rockies, en entrevista con la cadena de televisión ESPN2, ofrecida durante el descanso del partido, reconoció que el tobillo izquierdo seguía inflamado.

"Me estoy sometiendo a un tratamiento intenso, pero hasta ahora no puedo decir que tenga superada la lesión, sino todo lo contrario no estoy listo para poder jugar porque persiste la inflamación", declaró Beckham.

El ex jugador del Manchester United y del Real Madrid fue muy claro cuando recordó que había firmado un contrato por cinco temporadas y no sólo para disputar su primer partido, el del debut.

"Voy a estar aquí por cinco temporadas", señaló Beckham. "Como es lógico no he llegado para disputar el partido del sábado ante el Chelsea, que sin lugar a dudas es un gran club".

Beckham reconoció que tener como rivales a las estrellas del Chelsea era algo con lo que sentirse orgulloso para hacer un debut en su nuevo etapa, pero la evolución de la lesión era la que al final decidía.

"Tengo que reconocer que para mi personalmente, lo más importante en estos momentos es mi tobillo y no pienso que esté en condiciones cuando llegue la hora del partido", reconoció Beckham, que sin embargo, dejó abierta la posibilidad que pueda salir al campo algunos minutos.

Pero insistió que tal y como se sentía no pensaba que estuviese listo para el partido del sábado, aunque repitió que tendría que esperar.

Por su parte, el gerente general del Galaxy, Alexi Lalas, también abogó por una rápida recuperación de Beckham, aunque reiteró que no van a correr ningún riesgo.

"Mantenemos nuestra confianza que el sábado pueda jugar el partido, pero no podemos saber nada más hasta que no llegue la hora del partido", explicó Lalas. "Lo que también tenemos muy claro es que no vamos a hacer nada que ponga en peligro su futuro deportivo y de salud".

Lalas señaló que Beckham había ido mejorando día tras día, pero la última decisión sobre si puede o no jugar no se va a conocer hasta el sábado por la noche, antes que de comienzo en el encuentro en el Home Depot Center de Carson (California).

El gerente general del Galaxy, que dijo que eran conscientes del problema de las lesiones antes de fichar a Beckham, que la sufrió el pasado 6 de junio en partido jugado con la selección de Inglaterra, admitió que ni la televisión, ni los patrocinadores serán los que tengan la última palabra.

"Será el cuerpo técnico y los médicos del equipo los que evalúen el estado físico de Beckham", aseguró Lalas. "Entendemos el gran interés que ha generado el partido para la televisión, los patrocinadores y el mundo del fútbol, pero todos ellos también comprenden, que al margen que pueda estar el jugador en el campo, el momento va a ser importante".

Sin embargo, el problema principal para Beckham y el Galaxy no es el debut del sábado, sino el resto de compromisos de un apretado calendario que han montado en función de "explotar" al máximo su presencia e imagen, aunque su rendimiento todavía no pueda ser el más deseado, debido a que ha llegado sin ningún tipo de preparación y después del descanso al concluir la liga con el Real Madrid.

El Galaxy tendrá que jugar el martes contra el Pachuca de México en el primer partido del último torneo que se ha inventado la MLS junto con los directivos del fútbol del país vecino y que han denominado, la Superliga.

El sábado, 28 de julio, el rival serán las Chivas de Guadalajara y el 31 tendrán que estar en Dallas para enfrentarse al equipo local del FC Dallas, para a partir del 5 de agosto comenzar con los partidos de la competición regular de liga.

El Galaxy es el único equipo que sólo ha disputado 12 partidos en lugar de los 18 que llevan la mayoría, y todo porque cambiaron el calendario para que con la llegada de Beckham se pudiesen televisar todos.

Una pobre recuperación física de Beckham puede tener efectos muy negativos para el jugador y el resto del proyecto que han montado en torno a su figura dentro de la MLS.

Otro problema que se les puede generar a los directivos del Galaxy es que Beckham podría ser llamado de nuevo para formar parte de la selección de Inglaterra.

De acuerdo al calendario oficial del combinado inglés, tienen previsto un amistoso el 22 de agosto contra Alemania y competición de fase de clasificación para el Campeonato de Europa desde el mes el 5 de septiembre hasta el 21 de noviembre, tres días antes que se dispute la final de la Copa de la MLS, en Washington.

Lalas ha reconocido en la página oficial que el equipo tiene en internet que su objetivo es conseguir que Beckham pueda jugar el máximo de partidos con el equipo, pero también deben cumplir con el reglamento que establece la FIFA con relación a la cesión de los profesionales a sus respectivas selecciones si son llamados.

Tanto el seleccionador del equipo inglés, Steve McClaren, como el propio Beckham han reconocido que si puede seguir siendo un aporte positivo, no hay ninguna duda que volverá a vestir la camiseta de su país.

"Sabemos que la llegada de más talento internacional a la MLS, también supone que tendremos que aceptar que estos jugadores deberán cumplir con su mayor sueño profesional que es el de defender los colores del uniforme de su país y demostrar que nosotros formamos parte de la competición global", subrayó Lalas.