El técnico de la Universidad de Chile, Arturo Salah, decidió marginar por indisciplina y por "mentir sobre las causas de su ausencia" a un entrenamiento, al volante defensivo Jorge Acuña, confirmó hoy la directiva del club universitario.

Según Salah, que retornó a la tienda azul en esta segunda temporada del campeonato chileno, Acuña provocó una situación que no se enmarca en lo que busca el club ya que no llegó a entrenarse el pasado sábado y lo hizo sin ningún tipo de justificación.

"Aquí no se trata de poner mano dura sino que cada uno cumpla las normas, nada más. Son políticas que imperan en cualquier club", sostuvo el técnico, que anteriormente dirigió al Huachipato, de buena campaña.

Salah había sido categórico en condenar los actos de indisciplina que empañaron el desempeño de la selección adulta durante su participación en la pasada Copa América jugada en Venezuela, sin embargo días después debió lidiar con una situación similar.

El pasado sábado, Jorge "Kike" Acuña sencillamente no llegó a entrenarse con el equipo y aunque mando un certificado médico, argumentando un problema estomacal, el club decidió mandar a un médico a su domicilio para constatar en terreno la supuesta dolencia.

Ahí los directivos de la Universidad de Chile se dieron que el problema había sido otro, y que la misma noche del sábado, el jugador habría protagonizado un incidente en un club nocturno.

A ello se sumaba el mal precedente de haber lanzado un chicle a su compañero Rafael Olarra, en un partido amistoso jugado contra Colo Colo, su tradicional rival en la cancha.

"El está separado del club por una conducta que no se enmarca en lo que queremos construir, ya que en la estructura del plantel, no cabe este tipo de actitudes. Acuña faltó a una práctica, sin razón aparente", explicó Salah en una rueda de prensa.

"Esto no es poner mano dura y yo no soy nadie para imponer mano dura, porque eso lo imponen los propios jugadores, pero cuando empiezan los problemas, uno tiene que tomar las medidas que correspondan", señaló Salah.

Los directivos del equipo universitario tendrán ahora que ver como terminar la caducidad del contrato de Acuña, que tiempo atrás había rechazado una oferta para ir a jugar por un equipo de Israel.