Bolivia opina que retiro de veto a La Paz es un paso, pero no el definitivo.
Autoridades del Gobierno y dirigentes deportivos de Bolivia opinaron hoy que la autorización de la FIFA para que La Paz sea sede de las eliminatorias del Mundial de Sudáfrica 2010 es un paso, pero no el definitivo, en la lucha por el deporte en altitud.
El comunicado conjunto emitido hoy en Maracaibo (Venezuela) por Joseph Blatter, presidente de la FIFA, y Nicolás Leoz, su colega de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol), señala que la autorización se ha concedido atendiendo a un pedido específico de la Federación Boliviana de Fútbol y al respaldo unánime de la Conmebol.
No obstante, la declaración recalca que se autoriza en esta oportunidad, es decir, para las eliminatorias de Sudáfrica 2010, al estadio Hernando Siles de La Paz, ubicado a 3.577 metros sobre el nivel del mar.
Después se solicita a las autoridades políticas y deportivas de Bolivia que hagan gestiones para que La Paz disponga en el futuro de un escenario deportivo que contemple los estudios de la comisión médica de la FIFA, en una cota máxima de 2.500 metros sobre el nivel del mar, con una tolerancia de hasta 2.800 metros para las futuras competencias.
El levantamiento del veto al estadio Hernando Siles es un paso significativo, pero no el definitivo, porque no queremos excepciones, dijo hoy a los periodistas el alcalde de La Paz, Juan del Granado, aliado del gobierno presidido por Evo Morales.
Vamos a seguir luchando por la universalidad del deporte, declaró el alcalde al recordar que otras ciudades bolivianas como Oruro y Potosí y la peruana Cuzco todavía siguen vetadas por la FIFA por estar a más de 3.000 metros de altitud.
Mientras, en una rueda de prensa en la ciudad oriental de Santa Cruz, el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Carlos Chávez, anunció que una comisión médica va a trabajar de manera permanente en el país para demostrar que el deporte en altura no hace daño.
Por su parte, el ministro de Gobierno (Interior), Alfredo Rada, comentó que la habilitación del estadio de La Paz es un triunfo para el país y agregó que el esfuerzo unitario de todos los bolivianos en la lucha contra el veto ha dado su fruto.
Aconsejada por su cuerpo médico, que argumentó posibles daños a los jugadores si no hay previa posibilidad de aclimatación, la FIFA determinó en mayo pasado prohibir la disputa de partidos internacionales de fútbol en ciudades situadas a más de 2.500 metros de altitud.
La protesta de varios países suramericanos obligó a la entidad a ampliar el límite original de la prohibición de 2.500 a 3.000 metros, lo que habilitó a Quito (Ecuador) y Bogotá (Colombia).
El presidente boliviano, Evo Morales, ha encabezado la campaña contra el veto con un sinfín de demostraciones de las bondades del deporte en altura, e incluso jugó partidos de fútbol en dos nevados de Bolivia a 5.500 y 6.000 metros sobre el nivel del mar.