Pekín tiene previsto invertir 16,77 millones de dólares en restaurar su patrimonio cultural para que presente su aspecto original durante los Juegos Olímpicos del próximo verano boreal.

El Templo de Confucio, la Academia Imperial o el Templo Ancestral Imperial son algunos de los 31 lugares históricos incluidos en este proceso de renovación, según Yu Ping, subdirector del Buró de Reliquias Culturales de Pekín, citado hoy por la agencia estatal, Xinhua.

Además, la capital china ha encargado 300 señales, tanto en chino como en inglés, para que sean ubicadas en las inmediaciones de las reliquias culturales más sobresalientes de la ciudad.

El Buró ha impreso, según Yu, seis millones de mapas turísticos del patrimonio cultural del la ciudad en inglés-chino, que serán entregados en el aeropuerto, en la Villa Olímpica, en restaurantes y hoteles durante los Juegos Olímpicos.

Entre los proyectos de restauración, Pekín se ha propuesto recuperar algunos "hutongs", estrechos callejones centenarios a cuyos lados se alinean los "siheyuan", casas de un sola planta estructuradas alrededor de un patio común.

Aunque Pekín ha decidido nombrar patrimonio cultural de la ciudad a parte de estas características construcciones, en realidad no son más que 25 las zonas de "hutong" conservadas, un 0,4 por ciento de la ciudad, según el Plan Maestro actual, para lamento de historiadores y turistas, amantes de unas construcciones, en muchos casos, de más de 300 años de historia.

El lavado de cara de estos monumentos se suma a la que han sufrido o están sufriendo algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, como el Palacio de Verano, la Ciudad Prohibida o el Templo del Cielo. EFE