Aucas: lección de humildad y bravura
Eso de dejar “el alma en la cancha” no fue un decir. Los jugadores del Aucas cumplieron un partido tácticamente exuberante. Superaron y sorprendieron a los sabios “analistas”con garra, concentración, solidaridad y capacidad estratégica, al “favorito” de todos” LDU.Q que en el abarrotado estadio del sur “Gonzalo Pozo Ripalda” la vio “cuadrada” porque el temple, talento y derroche físico de los ídolos pudo más que la opulencia de nóminas, sueldos y títulos de los ocasionales rivales.
Los 12.000 auquistas que repletaron el sur y que fueron mayoría dentro y fuera del campo, comulgando la paz en un apasionante ”Superclásico” que fue el más vivo ejemplo de que cuando las hinchadas van a ver el fútbol, el espectáculo no solo es maravilloso, sino que además se convierte en un mensaje de confraternidad, solidaridad y amistad.
El espectáculo expuesto sirvió para llegar en forma emocionante al primer gol. El cemento se estremeció sobre la base del sur. Santiago Mallitasig (28 min), jugando el mejor partido de su vida se elevó por sobre Araujo y Romero, como queriendo llegar al cielo y con espectacular frentazo, puso su parietal derecho, quebrando “las aspas de molino” de Dida Domínguez que voló…pero fue para la foto del recuerdo.
El maestro Juan Ramón Silva, superó largo al promocionado DT “blanco” que salió sin reconocer que Aucas fue un equipo que mereció ganar, de no mediar el garrafal error de Blasquez que no pudo desviar el balón al córner, en una jugada que no tenía historia (67 min centro de Miller Castillo), convertido por un minuto ( 29) en el “héroe del sur” al atajar un penal al goleador “Cachete” Morales.
Los cinco de atrás estuvieron impecables: Jimmy Gómez, Darwin Quilumba, Horacio Salaberry, Edison Carcelén y Miguel Ibarra, pusieron alma y corazón, transpiraron la camiseta, disputaron cada balón como si fuera el último del partido y, fundamentalmente, sumaron, difícil misión ante el favorito LDU.Q equipo de alto volumen de juego y jugadores rápidos e inteligentes.
La consolidación técnico-táctica tiene una razón de ser. En el infierno de Samanes, Aucas ante River de Ecuador jugó en forma conservadora, en un campo que llamaba a lesiones, torceduras y fracturas. Empató en el minuto 99, pero el juez dictaminó otra cosa. Es decir, la estrategia fue prácticamente la misma. Y no hubo ni magia ni verso. Silva indica, mentaliza y convierte a sus jugadores en alumnos disciplinados, que han convertido, las fortalezas enemigas en oportunidades de victoria.
Es que fue en el camerino donde explicó la forme de expedición, de carrileros, volantes y delanteros. Así aprovechó las falencias defensivas del equipo visitante, que fueron muchas y continuas.
Aucas desde el primer minuto propuso una defensa sólida, sin errores, con actitud. Creció en volumen de juego, mientras avanzaba el partido, juntando ideas y compromiso. LDU.Q. manejaba el partido con solvencia, pero en los últimos 25 metros fracasó ruidosamente, porque las rimbombantes contrataciones (Mina, Matamoros, Morales) no sabían cómo desengancharse de la marca firme y pegajosa de Salaverry y compañía.
El gol de Mallitasig desniveló un sistema férreo e inteligente de la visita. Solo al final, la mística se impuso al desaliento y el coraje se transformó en el estallido de 12.000 auquistas que alentaron para que llegue la segunda, pero que al final y tras ver el titánico esfuerzo de los “ídolos” con humildad y felicidad aplaudieron el empate 1-1 mientras que jugadores e hinchas blancos “masticaban” rabia, porque perdieron 2 puntos (?). Nunca sumaron el punto de oro que sumaron en el estadio del sur. ¡Qué pena! Ojalá retorne la cordura a un equipo que tiene todo para llegar.
Todo lo que se planeó, se cumplió. Hubo unidad, multiplicación de esfuerzos; anímicamente los jugadores se mostraron superiores y el crecimiento técnico, la evaluación permanente, los hace poner los pies sobre la tierra, en procura de sumar puntos e ilusiones.
Y si los chicos hicieron cosas de grandes, hay que aplaudir a Nelson Lara, que con 18 años puede jugar al fútbol espectáculo y convertirse en el portaestandarte de una bandera que es gloriosa y tiene un pasado lleno de tradición y títulos.
Todos, con nervios, errores y defectos, deberán analizar el proyecto popular 2015 y sin perder la confianza ni un solo segundo en el largo campeonato, deben mentalizarse con la idea de que nada es imposible. Si están convencidos que son profesionales de primer nivel y reflexionar de que en el fútbol ecuatoriano no juegan ni Messi ni Cristiano Ronaldo, ahí verán que el equilibrio de todos, será la fortaleza del equipo más querido de Quito.
Entonces, aquella idolatría de antes volverá a tener una importancia real, con aquel porcentaje de sacrificio, que se ha transformado en fidelidad de una hinchada que goza con las hechuras de sus héroes que en todas las canchas del Ecuador, exponen siempre lo mismo: Aucas, garra y tradición, Aucas, papá e ídolo por siempre.
FICHA TÉCNICA
S.D.AUCAS. Sebastián Blázquez; Miguel Ibarra, Darwin Quilumba (TA) 70, Horacio Salaberry (TA 28), Edison Carcelén, Santiago Mallitásig, Jimmy Gómez (TA 34'), Omar Andrade (E. Méndez- 63 min), Jairo Padilla (J. Vélez- 76 min). Nelson Lara (Cristian Hurtado- 55 min-TA) 72' y Juan Carlos Villacrés.
Gol: Santiago Mallitasig (28 min)
DT: Juan Ramón Silva (uruguayo)
LDU.Q. Alexander Domínguez; José Madrid, Norberto Araujo, Luis Romero (TA 72 min), Pervis Estupiñan (J. Quinteros- 66 min), Enrique Vera (TA 26 min), Fernando Hidalgo, Holger Matamoros (L. Congo- 31 min), Diego Morales, Narciso Mina , Miller Castillo (Hansel Batalla).
Gol. Miller Castillo (56 min)
DT: Luis Zubeldía (argentino)
Por: Gonzalo Melo Ruiz