¿Existen o no cambios?

Enviado por robert el Vie, 29/01/2016 - 13:11

Cuando parecía que la situación de la FIFAgate estaba aclarándose y, con ello, se podría pensar en una restructuración del fútbol en su organización a nivel mundial y regional, se realizan las elecciones en la Conmebol. Por unanimidad se nombra a Alejando Domínguez para el cargo de presidente, y aparecen los miembros de la Liga Sudamericana de Fútbol, formada por los presidentes de un elevado número de equipos de los diferentes países sudamericanos (solo Liga Deportiva Universitaria de Quito), con su interés para recibir mejores premios durante la próxima Copa Libertadores de América. Sin embargo, aparecen contradictores directos a ese nombramiento, como el caso del gran arquero que tuvo Paraguay, José Luis Chilavert quien, abiertamente, señala que la corrupción continuará en este organismo continental, ya que, se trata de gente que continuará a los corruptos que estaban, uno muerto y los restantes presos.

Es obvio entender que quien vive de cerca estos manejos, como el caso de Chilavert, tiene mayores conocimientos de lo que allí ocurre pero, aparece algo que no podemos pasar por alto, ¿no existe entre ellos, alguno que sea honesto? Yo pude escuchar al nuevo presidente en sus primeras palabras cuando asumió la presidencia, y considero que muchas de ellas fueron importantes e interesantes. Por ello, creo que es necesario esperar que pase algo de tiempo, que podamos calificar su trabajo en una forma real, esperando eso sí, que todo se haga con la transparencia que todos queremos. Y, más aún, si se trata del manejo del maravilloso deporte como el fútbol.

Sin embargo, hay que considerar lo siguiente: desde que el FBI señaló personas como parte de estos organismos deportivos a nivel mundial y regional, que fueron asimilados en la investigación por la fiscalía de los Estados Unidos de Norteamérica. El nombre de la mayoría de los presidentes de las federaciones o asociaciones nacionales estaban entre ellos, y son quienes indicaron que la situación era complicada pues, lamentablemente, como ocurre en la mayoría de países, es el ciudadano el que los juzgó y condenó. Por ello, por inocente que haya sido cualquiera de estos funcionarios de alto nivel del fútbol a nivel americano, debieron haber renunciado, incluso, para poder defenderse sin ninguna atadura ante la opinión pública, ya que, casi todos están siendo investigados por la fiscalía de cada país.

Muchos lo hicieron, pero otros no. Entre ellos, el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol. Pero ahora, existen ya versiones de algunos de los directivos acusados, señalando que “es hora de decir la verdad” y dejar que la justicia de cada país, continúe con las investigaciones y, si les parece procedente, que los dejen libres de culpa o, pasen a continuación, a los juicios correspondientes. Algo que la gente no se ha dado cuenta o, si lo ha hecho, no les interesa llegar a la  verdad, es que “el fútbol profesional ecuatoriano quedó manchado con esta situación tan grave, como es la corrupción”.

En este momento, no se trata de obtener nombres para sancionarlos pues, de eso se encargará o no, la justicia de nuestro país. Lo realmente grave es, que para casi todos los aficionados al fútbol, quienes han estado a la cabeza de cada organismo nacional, de una u otra manera, han permitido –la peor de las faltas- que la corrupción campee en los medios futbolísticos y, que de esa forma, han estado dando su beneplácito para que eso continúe ocurriendo. Es verdad que de acuerdo con lo que establece la ley del país, todo el mundo es inocente, hasta que se pruebe lo contrario. Y, por ello, eso significa que en lo que dice el vulgo, existen varios nombres que son inocentes, pero que, aparecen como culpables sin serlo. Eso quiere decir, que era tiempo de presentar sus renuncias y que puedan decir sin reparo alguno, “ahí está mi vida, indaguen todo lo que deseen, que no encontrará nada”.

Por el contrario, eso no ha ocurrido y, por lo tanto, ante la “vindicta pública”, una gran cantidad de dirigentes del fútbol profesional de nuestro país, de algunas asociaciones, e incluso, de algunos clubes, ya han sido sentenciados por el pueblo, que es el “verdadero juez”. Sin lugar a equivocarme, creo que es hora de que se encuentre una total restructuración de la FEF (mejor ahora que apareció la Asociación de Fútbol Profesional Ecuatoriano), como yo lo he pedido a través de mis comentarios, desde hace algún tiempo, ya que, solamente con una nueva cara, se podrá enseñar al balompié rentado ecuatoriano a todo el mundo futbolero.

Estamos a días de que se inicie el campeonato ecuatoriano de fútbol del presente año, aunque los reclamos de pagos de varios jugadores, técnicos y de la AFE, continúan hasta el momento. Ojalá la situación termine y no existan más tropiezos a lo largo del torneo nacional. Finalmente, recuerden que todo lo que han leído, solo es mi opinión personal.

Por: Jorge García Romo