Gracias a que el fútbol no tiene ninguna lógica, cuando estamos en la mitad de las eliminatorias para el mundial Rusia 2018, el equipo ecuatoriano se encuentra en el grupo de “viaje directo” que, creo que todos los aficionados al fútbol del país deseamos pero, se inician algunos partidos aparentemente difíciles, si consideramos los nombres de los rivales y, sobre todo, lo que han realizado hasta el momento. Por esa razón, la pregunta de este comentario, ¿cómo nos irá frente a Uruguay?, ya que, se trata de nuestro siguiente rival en las eliminatorias.

Si realizamos un análisis puntual, creo que Uruguay ha sido el equipo más regular de las eliminatorias, pese a que al momento, haya dejado la punta, ante un Brasil que comenzó mal, pero que ahora se encuentra disfrutando de su buen juego, gracias al recambio realizado por su nuevo director técnico Tita que, buscó como base para el equipo al plantel que ganó, recientemente, el campeonato de fútbol olímpico. Es decir, gente joven y suficientemente probada, a la que, ha añadido unos cuatro jugadores de los llamados “referentes”, para darle al conjunto la fuerza y la experiencia que necesitaba, ya que, eso es lo que se debe realizar en cualquier equipo que desee sobresalir.

Uruguay, es posiblemente, el equipo con mayor edad del evento futbolístico pero, pese a ello, si ha tenido la incorporación de algunos jóvenes elementos, que le ha venido a dar la frescura que todo equipo necesita, ya que, una mezcla exacta de juventud y experiencia, forma la fórmula del éxito pero, eso sí, con jugadores que vienen jugando normalmente en sus clubes. Mientras que, veamos lo que le ocurre a nuestro querido país. La mayoría de los jugadores convocados no juegan habitualmente en sus clubes y, por esa razón, la falta de fútbol les afecta no solamente a ellos, sino al ensamblaje mismo del seleccionado.

En el partido frente a Chile pudimos mirar algunos cambios interesantes pero, no ocurrió lo mismo en el cotejo frente a Bolivia donde, a mi criterio, se equivocó el técnico, al enviar al “matadero” a los jugadores, conociendo que los bolivianos iban a cargar y a tratar de abrir el marcador desde el principio. Por esa razón, para el segundo tiempo, hubo que comenzar con dos goles en contra. Para que esto no ocurra, no se necesita demasiados conocimientos técnicos, simplemente, algo de sentido común que, lamentablemente, todos conocemos que es el menos común de los sentidos. Cuando se calmaron y organizaron, gracias a Dios se logró igualar el marcador, aunque para mí, fueron dos partidos totalmente diferentes: el primero jugaron bien, mientras que, el segundo fue todo lo contrario.

Para el cotejo con Uruguay, el combinado nacional tiene que cambiar todo el bloque posterior, lo que, no entrega al equipo mayor seguridad. Por lo tanto, confiemos que el seleccionador nacional piense un poco en cómo enfrentar a ese gran equipo que tendremos al frente, sobre todo, porque a diferencia de los bolivianos, los uruguayos son jugadores conocidos, con experiencia y, de gran calidad. Por lo tanto, hay que armar un equipo lo suficientemente “defensivo” para abrir el juego y, para ello, me parece a mí, que la presencia de Casares es fundamental, ya que, se trata de un jugador que hace la pausa y hace jugar a sus compañeros y, si le dejan espacio, también remata en gran forma desde media distancia. Además, puede ser una gran ayuda para Noboa.

Luego recibiremos en casa a Venezuela pero, cuidado, pese a que ha demostrado no estar al mismo nivel, son equipos que pueden sacar fuerza y entrega que, pondría al combinado nacional en apuros. Es necesario que, al igual que frente a Chile, se juegue a ganar desde el comienzo, ya que, si Ecuador desea clasificar al mundial, no debería perder un solo punto más en calidad de dueño de casa y, por el contrario, buscar cómo obtener la mayoría de puntos jugando como visitante.

Sin embargo, todos conocemos que lo que ustedes están leyendo es solo mi opinión personal que, ojalá la lea el seleccionador nacional y la tome en cuenta. Ya que, igualmente, todos entendemos que la única persona que arma el equipo y escoge los jugadores y es responsable del funcionamiento del seleccionado ecuatoriano, es el director técnico que, por obvias razones, al ser profesional en la material, sabe muchísimo más que un aficionado como yo. Como soy un gran amante de la tauromaquia, terminaré mi comentario diciendo, “que Dios reparta suerte”.

Por: Jorge García Romo