Como uno de los buenos enfrentamientos de la Copa Libertadores de América estaba el “Superclásico” argentino, entre los equipos de Boca Junior y River Plate y, los aficionados de los continentes americanos, estábamos pendientes del mismo. Boca que había cumplido en forma perfecta durante la primera etapa de este torneo internacional y River, por su parte, que había logrado ingresar con las justas a los octavos de final. Lo cierto es, que el jueves anterior se enfrentaron en el cotejo de vuelta en la “Bombonera”, luego de que el primer partido había ganado por la mínima diferencia River, en un partido malo, con un arbitraje pésimo.

Había transcurrido el primer tiempo de este partido definitivo y el cero a cero que se señalaba en el marcador, dejaba clasificado a River, aunque Boca tenía cuarenta y cinco minutos, para poder revertir el marcador y alcanzar su clasificación; pero, ocurrió lo imprevisto, lo que nadie se hubiera imaginado y, la “estupidez humana” apareció en la manga de ingreso al campo de juego del equipo visitante y cuatro jugadores de River, fueron afectados, “supuestamente”, por el llamado gas pimienta, aunque todavía no se ha podido certificar ello, por parte de los investigadores.

Lo cierto es que, cuatro jugadores sufrieron los efectos de alguna substancia irritante, tanto para los ojos, como para la piel misma, según se pudo observar a través de la televisión. ¿Quién lanzó esta substancia a los ojos, cara y cuerpo de los cuatro jugadores de River?, nadie lo ha podido establecer. Se dice, en los miles de rumores que se dijeron desde ese momento, que fueron los hinchas de una de las plateas, ya que, estaban ubicados en la parte exterior de la manga de salida del club visitante pero, nadie ha podido ratificar hasta el momento que haya sido un mal hincha de Boca pues, bien pudo haber sido un “infiltrado” del mismo equipo afectado. Incluso se dijo que pudo haber sido un policía.

Al final, nadie conoce todavía quién en  realidad fue el autor de ese acto de barbarie en pleno siglo XXI, cuando se habla de las bondades de la tecnología. Mucha payasada de parte de jugadores, directivos, agentes de seguridad y policías, hasta que el árbitro suspenda el cotejo (?). Al final, existían víctimas y victimarios, sobre todo, por los comentarios antojadizos de varios de los “periodistas – fanáticos” de los dos clubes, que a toda costa, quería tirar “el agua a su molino”.

En la noche del sábado 17, en la Confederación Sudamericana de Fútbol en Paraguay, al fin, se pudo conocer la sanción para el dueño de casa Boca Junior, perjudicándole al club, en sus claras aspiraciones para el torneo internacional y, directamente, para su futuro inmediato; y, dando paso, a que su contendor, no en forma deportiva, alcance a dar un paso importante dentro de la Copa Libertadores de América. ¿Así se maneja el fútbol en el ámbito sudamericano?, ¿por qué no se ganan los partidos en el campo de juego y tienen que hacerlo en una mesa directiva?, son dos preguntas, que todos quienes amamos este maravilloso deporte como es el fútbol, lo mantendremos en nuestras mentes, aunque una vez más, la “estupidez humana” se ha impuesto ante la sinrazón de lo acontecido.

La sanción, descalifica a Boca Junior de la Copa Libertadores 2015; le obliga a que los próximos cuatro partidos organizados por la CONMEBOL, juegue sin público, a puerta cerrada; le prohíbe vender entradas a sus hinchas, durante cuatro fechas en torneos organizados por la CONMEBOL donde juegue como visitante, que se extiende a los equipos que actúen como locales; le impone una sanción accesorias de doscientos mil dólares, que tienen que estar depositados en la cuenta bancaria de la CONMEBOL, en el plazo de siete días; y, se advierte a Boca Junior, que cualquier otro acto de indisciplina que vuelvan a cometer, obligará a la CONMEBOL, a que aplique el artículo No 43 del Reglamento Disciplinario. Esto es, que estaría “en carpeta”, durante cinco años, ya que, se consideraría como “circunstancia agravante”.

Si analizamos, detenidamente, la sanción, podremos darnos cuenta que, aunque por disposición legal la misma pueda ser apelada, el daño ya está hecho y, el club más popular de Argentina, tendrá que sufrir las consecuencias, más aún, en un año electoral en el club y, en igual forma, electoral en el país donde varios ex – dirigentes boquenses participan. En otras palabras, la actitud delincuencial de algún desadaptado, ha perjudicado deportiva y económicamente –no se sabe si, fue un fanático o un infiltrado-, a este club que tantos títulos ha alcanzado en su larga vida deportiva. Por eso mis amigos he titulado este comentario como “la estupidez humana”, ya que, solo eso es lo que el ser humano pensante y consciente, todavía no ha podido derrotar. Finalmente, como ya es costumbre, recuerden mis amigos lectores, que lo que acaban de leer, no es sino mi opinión personal.

Por: Jorge García Romo