¡Dominio total y el mismo marcador!
Sufriendo porque era muy difícil flanquear la valla de seis hombres que le puso Bolivia pero, al final, demostrando su verdadera calidad y, teniendo a jugadores como Valencia, Casares y Bolaños que se destacaron, luego de ser un dominador neto, Ecuador doblegó a su rival de turno, por 2 goles a 0, en medio de la algarabía y la locura de los aficionados que, aguantando el aguacero, terminamos aplaudiendo a rabiar a los jugadores del equipo tricolor.
La fuerte e incesante lluvia que cayó en Quito, casi a los cinco meses de una sequía espantosa, no permitió a los jugadores ecuatorianos, desarrollar su juego, porque el campo estaba lleno de grandes charcos de agua y, era casi imposible el poder dominar el balón como están todos ellos acostumbrados; sin embargo, el dominio fue notable, ya que, poniendo un poco de números, unos 38 minutos del primer período, se jugaron en campo boliviano que, con una táctica muy bien planificada y totalmente defensiva (5-3-2), al que se le suman los charcos de agua, generaron dificultades que hasta dos horas después del mediodía, nadie siquiera se suponía.
Por lo menos unas diez ocasiones, el equipo ecuatoriano tuvo contra su arco al conjunto adversario que, en cambio, llegó tan solo en dos ocasiones con cierto peligro. Uno, tras una falla de Erazo que fue contenida por Domínguez y, otro un gran disparo que golpeó en el vértice superior derecho con relación al arquero nacional. El resto del encuentro en la primera etapa, fue un dominio asfixiante pero, que no pudo convertirse en una anotación, que creo que era lo que todos los ecuatorianos esperábamos. Sin embargo, así es el fútbol y, por ello, lo emocionante y maravilloso que es.
El segundo tiempo fue jugado solo en la cancha de Bolivia y, me acordé de aquel muro del tenis que le llaman frontón pues, eso parecía el equipo de la visita, impidiendo que llegue un gol de Ecuador, tendiendo para ello, un gran arquero y todo el resto del equipo dentro del arco. No había tenido la oportunidad de mirar un partido de fútbol en esas condiciones. Sin embargo, el ingreso de Casares le permitió un mejor toque del balón al equipo ecuatoriano, además que mejoró el terreno de juego, porque terminó la lluvia. Valencia que era el conductor del plantel, retrocedió de su puesto habitual y pasó al de lateral derecho. Y con, el ingreso de Martínez por la derecha, tuvieron algo de penetración por ese lado, aunque poco pudo hacer porque ese no es su perfil y, para levantar centros, tenía que darse la vuelta completamente. Montero luego de un gran primer tiempo, rindió fruto al esfuerzo realizado. La defensa no sufrió mayor problema pese a la lesión de Achiller pues, Mina que lo sustituyó, fue un delantero más con sus grandes remates de cabeza, que fueron alejados en buena forma por el portero boliviano.
Existió angustia en los jugadores compatriotas porque no llegaba el gol pero, a los 35 minutos del segundo período, un pase magistral de Casares para Bolaños, le permitió a éste rematar y conseguir el primer tanto, que tanto se esperó. Luego, el toque del balón continuó por parte del equipo ecuatoriano, hasta que al segundo minutos de compensación de los tres que había otorgado el buen juez brasileño, Caicedo dominó el balón, se llevó un delantero y, cuando iba a rematar, fue trabado dentro del área y, se sancionó tiro penal que, cobrado por el mismo centro delantero, se convirtió en el segundo y último tanto del partido. La locura llenó al límite y, vaya comienzo, obteniendo seis puntos de los primeros seis disputados. En noviembre recibirá a Uruguay y, luego de ello, tendrá que viajar a Venezuela. Felicitaciones y adelante muchachos.
ESTADO DE LA CANCHA
Qué pena que un escenario deportivo que durante muchos años fue mantenido con un gran celo y cuidado, ahora se encuentre en pésimas condiciones. Muchos años atrás, cayó no solo un aguacero, sino una granizada que dejó blanco al campo de juego pero, el gran sistema de drenaje, eliminó el agua en poco tiempo, pudimos observar un gran partido frente a Chile, a quien le ganamos en esa ocasión, por primera vez. Este me parece que es un llamado de atención, para exigir a los políticos que, durante las campañas respectivas, hablaron mucho de una rehabilitación del estadio olímpico Atahualpa. La exigencia se la realizó durante mucho tiempo, porque como ahora, se necesita mucho dinero para hacerlo. ¿No es verdad doctor Barrera?
Por: Jorge García Romo