Cuando llegamos a conocer de las detenciones de directivos de la FIFA en Suiza, ese “monstruo del deporte” comenzó a caerse en pedazos y, de acuerdo a la versión de la Fiscal General de los Estados Unidos Loretta Lynch, en varias ocasiones, ha salido a dar versiones públicas sobre el avance de las investigaciones que realiza el FBI, ya que, según se ha podido conocer, alguno de los actos de corrupción ocurrió en territorio americano. En cada ocasión, algunos de los presidentes de las federaciones nacionales de los países de Centro y Sudamérica. Muchos de ellos, en forma pública han aceptado su participación. Ayer, en horas de la mañana, a través de CNN, pude escuchar lo que dijo la Fiscal y, en igual forma, la acusación al presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, entre otros, por parte del Departamento de Justicia de los Estados Unidos.

Se han escuchado versiones de diferente tipo. Unos lo acusan directamente, mientras que otros lo defienden, sobre todo sus compañeros directivos de la federación. Entre los aficionados, también existen versiones diferentes al tratar del tema, sin embargo, recuerdo siempre lo que me decían mis antepasados: “cuando el río suena, piedras trae”. En otras palabras, salvo alguien en realidad inmaculado en su honestidad o, algún “vivo” que se las dé como honesto, de una corriente como la ocurrida, algo tiene que haber y, si es dentro del campo de la corrupción, la suciedad puede quedarse en cualquier lado y con cualquier persona.

Mi padre, un ejemplar militar del siglo pasado, muerto hace 55 años, me decía cuando era niño, “que si uno se sube a un árbol de gran altura llevando una funda de plumas y, desde lo alto, lo lanza al vacío, nunca podrá recoger todas las plumas que inicialmente, estaban en el interior del saco”. En otras palabras, la honra de las personas es lo que hay siempre que cuidar, para evitar que alguien “se lleve algo de más”. Muchas personas utilizando las redes sociales, llaman la atención y acusan -sin dar nombres- de que todos los periodistas deportivos estamos involucrados con la corrupción de la FIFA, para tratar de protegerlo por algunas prebendas recibidas. Pero, están cayendo en lo mismo que le reclamamos al presidente Correa: “no a las generalizaciones”. Y, si a esto, le aumentamos que algunos mediocres se unen a estas acusaciones, siempre sin dar nombres, son peores que los corruptos comprobados, ya que, hablan de memoria sin saber a quién se refieren, solo por figurar. ¡Qué pena tanto analfabeto¡

Aunque tengo tres profesiones universitarias de tercer nivel y una de cuarto nivel, no estoy en capacidad de decir que el presidente de la FEF es un corrupto pues, eso no se ha probado en ninguna investigación o con la sentencia de algún tribunal de justicia. Por lo tanto, al dirigirme a el como persona, lamento lo que le está ocurriendo y, espero por el como persona y por su familia, que pueda comprobar su inocencia. Sin embargo, el fútbol ecuatoriano si está al momento golpeado y, en forma directa. Mucho lodo ha caído sobre él. Conocí esta mañana que el presidente de la FEF solicitó permiso para poder dedicarse a su defensa, y que, el vicepresidente ocupará su cargo. Yo, personalmente, creo que lo mejor hubiera sido que renunciara, con el único objeto, de no dejar dudas en el ambiente y, permitir que la entidad continúe su actividad. Pero ésta, solo es mi opinión personal.

Durante los últimos años, han existido varias situaciones administrativas en el manejo de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, y yo, a través de este portal y gracias a la bondad de los propietarios que han aceptado mi colaboración desde hace varios años, lo he atacado duramente pero, de acuerdo con la ética periodística, colocando los puntos sobre las íes pero, bajo ningún motivo, haciéndole acusaciones de tipo personal. Esa es una de las ventajas que tiene nuestro maravilloso idioma como es el castellano. Se puede ser mordaz en cualquier momento, sin llegar a herir susceptibilidades y, peor aún, ser hiriente en sus valores humanos morales o familiares.

A través de este medio, doy dos veces por semana mi opinión. Quien no esté de acuerdo conmigo, cosa muy frecuente en un país con libertades básicas, siempre y cuando del gobierno no vengan a cobrar “peaje para hablar”, ya que, desde ayer en que para mí “se legalizó la dictadura” en el país y cualquier cosa puede pasar, pueden enviarme sus puntos de vista divergentes y, los señores de TERADEPORTES, estoy seguro me los harán llegar.
 
La corrupción es una lacra de la humanidad que, lamentablemente, existe y creo que seguirá existiendo pero, eso sí, en gente que busca tener dinero con una ambición desmedida, en su mayoría, por falta de educación. Y, para que conozcan todos si no lo han hecho con anterioridad, la poca educación de nuestro pueblo, es la lacra que lleva a problemas como el que estamos tratando. Estas notificaciones de la justicia norteamericana al dirigente máximo de la FEF, no solo son una vergüenza para el fútbol profesional ecuatoriano, sino que además, deberían ser una vergüenza para todo el país.

Por: Jorge García Romo