El ecuatoriano 9 de octubre se impuso 2-0 (3-1 global) este jueves a su compatriota Delfín en el partido de vuelta de la primera etapa de la copa Sudamericana-2022, con lo que pescó su pase a la ronda de grupos del certamen.
En el estadio Christian Benítez, del puerto de Guayaquil, el cuadro patriota firmó la sentencia de muerte de los cetáceos con anotaciones del mediocampista panameño Ricardo Phillips en el minuto 35 y del capitán Danny Luna en el 40.
El primer tanto del encuentro fue producto de un pase de Renny Castillo y un potente remate con derecha de Phillips desde afuera del área. El balón viajó al ras del gramado y se metió por el palo izquierdo del arco defendido por el experimentado Máximo Banguera.
Cinco minutos después, otro panameño, el delantero Newton Williams, ayudó a construir la jugada que determinó el triunfo de los patriotas. Su asistencia habilitó a Luna que también con la derecha lanzó un pelotazo desde el centro del área. La pelota aterrizó en el costado derecho de la portería.
Con mayor posesión de la pelota, más disparos al arco y mejor precisión en sus pases, 9 de octubre se erigió como el justo ganador del boleto para la fase de grupos de la Copa Sudamericana.
Además de los autores de los goles, el defensa Geovanny Nazareno y el mediocampista Marcos Cangá fueron los estudiantes aplicados que cumplieron con sus tareas, logrando controlar en la mayoría de las ocasiones los embates del rival.
- Angustia -
La puntería y la definición le fueron esquivas a los cetáceos que remaron con todas sus fuerzas para marcar y revertir un resultado desfavorable. El mediocampista ecuatoriano Andrés Chicaiza y el delantero John Cifuentes dirigieron el bote de Delfín, pero no pudieron atracar en buen puerto.
En el 45+2 Cifuentes recibió en bandeja de plata un pase. Lo tenía todo para anotar, pero el arquero Jorge Pinos se adelantó a su jugada cortándole espacio, lo que derivó en un tiro que voló lejos del arco.
Al regreso de las duchas, en el 63 Chicaiza, el 'mago de Otavalo', con una jugada soberbia y acrobática intentó marcar el del honor. Pero su tijera no fue efectiva y el balón chocó en el travesaño.
Para ese momento 9 de Octubre hacía un ejercicio de resistencia más que de presión, lo que le dio fuerza a los 'cetáceos', que lejos de decaer por el resultado en contra mostraron agallas. Sus pases fuertes y largos inhabilitaron los intentos de los octubrinos por interceptar la pelota.
Los últimos minutos del encuentro, la mayoría del encuentro se jugó frente al arco de Pinos. Uno tras otro fallaron los tiros. Entonces la angustia apareció entre los jugadores del club manabita.
Cifuentes y Chicaiza volvieron a aparecer. El 'mago de Otavalo' incursionó desde atrás ganándole el balón al jugador Cangá, pero su disparo, una vez más, salió desviado.
Los 'octubrinos' vuelven a disputar un torneo internacional luego de 37 años. El club jugó la Copa Libertadores en 1966, 1984 y 1985. AFP