Luego del partido que pude observar a través de la televisión entre Liga Deportiva Universitaria de Quito y el Macará de Ambato, cotejo que terminó empatado a un gol por bando y, que el señor Bauza –Director Técnico de Liga- en sus declaraciones expresó, “que Liga en el segundo tiempo tuvo la pelota, pero no supo qué hacer con ella”; y, además dijo, “Es muy difícil justificar lo injustificable, armamos un equipo con la intención de presionar en el campo contrario pero, creo que el equipo careció de claridad”, no existe ningún problema en comprender su ubicación al momento, en el bloque inferior de la tabla de posiciones.

Todos conocemos y no nos equivocamos al decir que Liga Deportiva Universitaria de la ciudad de Quito es el equipo ecuatoriano que mejor ha dejado el nombre del fútbol ecuatoriano pues, en su vida deportiva, ha alcanzado cuatro títulos internacionales: un título como campeón de la Copa Libertadores de América; un título como campeón de la Copa Sudamericana; y, dos títulos como campeón de la Recopa, o sea, campeón del enfrentamiento de estos dos torneos internacionales, los más importantes del continente sudamericano. Sin embargo no es el único pues, hubo otro equipo ecuatoriano, el América también de la ciudad de Quito, que en el año 1971 ganó la Copa Ganadores de Copa (La Recopa Sudamericana de Clubes, también conocida como Copa Ganadores de Copa, fue una competición internacional futbolística organizada por la Conmebol), y que, correspondió al título de campeón entre los equipos subcampeones de Sudamérica (ese torneo solo se jugó durante dos años: 1970 y 1971). 

Por eso el titular de mi opinión actual pues, yo –como catedrático universitario que soy-, veo los tiempos en semestres, ya que, creo que, definitivamente, algo está ocurriendo en ese equipo que tanta gloria ha dado al deporte ecuatoriano, no solamente a sus hinchas, sino en forma general, a los buenos aficionados al fútbol. Hasta el inicio de este campeonato, los hinchas del equipo albo decían, que “había mucho jugador viejo en el plantel”. Eso, sin lugar a equivocarme, creo que los dirigentes ya lo subsanaron pues, se contrataron a 14 nuevos jugadores, siendo en su mayoría, jugadores jóvenes de los distintos equipos del país y, trayendo del exterior, algunos nuevos jugadores menores de 30 años. Es decir, ese pedido se cumplió. Cierto es que no todos los “viejos jugadores” salieron pero, sí en su mayoría.

De lo que conocemos, es uno de los pocos equipos ecuatorianos que, pese a la crisis económica que viven los restantes, están al día en sus obligaciones -con enormes sacrificios de los dirigentes- que, son de las pocas excepciones, ya que, han cumplido como buenos profesionales y conocedores de lo que tienen que hacer. Por lo tanto, tampoco podemos echar la culpa al aspecto económico – financiero. Entonces, nos preguntamos, ¿qué está en realidad pasando? Muy difícil conocer pormenores del club pues, el periodista debe mantenerse lejos de estas situaciones que solo les compete a ellos. Pero, lo que si podemos, es decir criterios u opiniones de otro tipo que, nos van a llevar a lo mismo y, sin realizar acusaciones infundadas. Por ello, recuerdo lo que me decían los profesores universitarios en la materia de Administración: “cuando la cabeza no funciona, nada en realidad puede funcionar bien”. No me refiero a los dirigentes pues, lo que a mí me compete, es en el aspecto deportivo. ¿Me entienden verdad?

Ya los directivos del club han expresado que el señor Bauza termina el año y no va a continuar en sus funciones en el plantel pero, ¿no se ha perdido ya un semestre? Creo que si su actividad está próxima a terminar, ¿no era lo lógico, contratar a un nuevo estratega, que venga con ideas nuevas para estos jóvenes jugadores albos, ya que –en la realidad- se necesita algún tiempo para adaptarse al mismo? En forma personal, creo que eso se debió hacer cuando terminó la primera etapa del torneo ecuatoriano del presente año. Por eso, mi pregunta en el titular, “otro semestre más”. Muchos hinchas del equipo ligado –que son mis buenos amigos-, están de acuerdo con mi posición. Entonces, creo que no estoy equivocado, sino por el contrario, expreso en estas líneas lo que ellos no lo pueden hacer.

No soy hincha de Liga Deportiva Universitaria de Quito pero, como buen aficionado que ha visto las maravillas del mejor de los deportes –el fútbol- desde hace 65 (desde cuando tenía cinco años) en un escenario deportivo, he disfrutado de los éxitos de este plantel universitario pero, de igual manera, creo que puedo realizar este comentario esperando, mejores días para la institución que, desde su formación legal, ha representado a la querida Universidad Central del Ecuador.

Jorge García Romo.