GRECIA 2- AUCAS. 1- Derrota inexplicable, las infaltables desconcentraciones de zagueros y volantes de Aucas, al inicio, en la mitad o al finalizar el encuentro ante el modesto Grecia, permitió que los manabas respiren con tranquilidad en una brega donde el mortal calor afectó más a los locales antes que a los visitantes que terminaron el partido atacando, como una señal de vigor y respuesta al cambio estratégico ( 4-1-4-1 inicial se pasó el 4-4-2), logrando el descuento, y dominando hasta el final, con una que otra acción de igualdad.

El enfado del equipo marcó este triste final. Las variantes del DT Veloz, mostraron quienes son los auténticos titulares y los modestos suplentes. Ninguno dio la talla ante la emergencia. Reemplazar a Corozo, Willy Sánchez, y Mallitasig fue una misión imposible.

Un cabezazo en plena área de Mendoza (27m) y un libre de Thiago, marcaron el final de los fatídicos 45 de apertura donde Aucas tuvo una pálida presencia con un remate desviado del Potrito Figueróa (5m)

Es que tibiamente no se puede ganar un partido. Había que volver al “hambre de triunfos”, a respirarle en la nuca al rival, a no dejarle pensar, a quitarle el balón, a posesionarse del campo a proponerle un partido en el que solo el más fuerte podía triunfar.

Y en ese estado de cosas, con espacios que nunca fueron acortados, ni marcados con el paso del tiempo, el rival, un equipo modesto, que tenía lucidez y perfectas triangulaciones creció, viendo la pasividad del visitante (Aucas).

Con ataques rápidos y desconcertantes, comiéndose por la izquierda al inexperto Darwin Suárez, vino la primera, tras centro de Zambrano, que obligó el vuelo de Mendoza que con vistosa palomita puso el 1-0 cuando apenas se jugaban 27 minutos. Nadie llegó a tiempo. Después, todos se recriminaban.

La micro-sociedad Gustavo Figueróa y Jimmy Delgado, no tenía conexión, por el sistema impuesto tras un tímido arranque donde el fútbol kilométrico, sin precisión, quitó visión de gol a Minda y Quintanilla.

Aucas, apagado y débil, por la poca cohesión que tuvo con la zona de producción, con Méndez y Triviño, se confundía en la marca y habilitación, sin acercarse siquiera hacia la portería de Jerónimo Costa que gritaba y ordenaba a quienes querían dejar sin protección a su zona defensiva.

Llegó un momento en que los luchadores volantes del Grecia Caicedo, García y Bone, les tocaron el balón, como si fuera indorfútbol a los sudorosos visitantes, una burla en verdad.

Y vino el puntillazo final de la primera parte. Thiago de Mello, cobra un tiro libre (34m), hacia donde estaba parado “Calolo” Espinoza. Curiosamente el golero se va al otro costado en forma inexplicable y el balón ingreso por el lado del golero (?). 2-0, se pensaba en la debacle.

Por suerte, no fue así. Sin dejar de luchar vino el descuento por inspiración de lateral Omar Pillataxi, que sacó un disparo bajo (77m), con pierna derecha (siendo zurdo) y acortar cifras 2-1. Ya no hubo más tiempo, Grecia cerró el partido antes, sacando a los brasileños y poblando el medio campo con volantes de marca.

SIN VESTUARIO COMPLICADO

Eso de dejar “el alma en la cancha”, no es un decir, es una máxima para llegar a ser el grande de siempre. No quiero saber que el vestuario está complicado, dividido y con jugadores que se miran con recelo. La actual administración ha entregado, mediante el cumplimiento económico, estabilidad, paz y confianza. Si es que hay que deponer posiciones entre jugadores y entregar la “cuota de poder”, pues háganlo, no se coloquen en el trono, bájense de él y piensen en el equipo más querido del pueblo ecuatoriano.

Darwin Veloz, la tiene bien clara.  Los jugadores que entren a la cancha deben poner el alma, transpirando la camiseta, disputando cada bola como si fuera la última y, fundamentalmente, logren dar bien tres pases seguidos.

Ahí está el reto. Este tropezón debe servir para que todos se pongan la mano en el pecho y reflexionar con inteligencia, hablar con la verdad, sin hipocresías y ofrecer el cambio para el futuro, ese que marcará la continuidad exitosa para el 2014 o el engaño permanente en sus mentes por no haber aprovechado la oportunidad de sentirse honesto y realizado.

PARA LA ESTADÍSTICA

GRECIA.- Jerónimo Costa; Esteban Villaprado, Ider Mendoza, Gilbert Quiñonez, Víctor Santana, Sergio Bone; Diego García, Edison Caicedo, Thiago de Mello, Braulio Falcones, Johnny Da Silva.
Goles: Ider Mendoza (27), Thiago de Melo (34).
S.D.AUCAS.- Carlos Espinoza; José Quinteros, César Mercado, Edison Carcelén, Darwin Suárez; Edwin Méndez, Juan Triviño, Diego Quintanilla y John Minda; Gustavo Figueróa y Jimmy Delgado.
Gol: Omar Pillataxi (77m).  

Gonzalo Melo Ruíz.