El Manchester United se paseó hacia los cuartos de final de la Liga de Campeones sin forzar la máquina y, gracias a una buena combinación entre Cristiano Ronaldo y Henrik Larsson, repitió el resultado de la ida frente a un blando Lille (0-1).

El conjunto británico volverá a una fase de la competición que no disputaba desde hace cuatro años.

A los ingleses les bastó con un golpe de ingenio para imponerse, al igual que les había sucedido en Francia, cuando se llevaron la victoria gracias a un oportunista gol de Ryan Giggs, que sacó una falta cuando se estaba colocando la barrera francesa.

Esta vez fue el sueco Larsson, que volvió a demostrar que vive una luna de miel con la Liga de Campeones al aprovechar un buen centro de Cristiano Ronaldo para dejar el triunfo en Old Trafford.

Héroe de la pasada final de la competición con la camiseta del Barcelona, el escandinavo hizo un último regalo al que ha sido su público en los últimos meses, un presente que servirá como despedida al jugador cedido en el Manchester hasta el próximo día 12, cuando deberá volver al Helsinborg.

Los ingleses no fueron brillantes, pero no les hizo falta. Les bastó con estar bien asentados tácticamente y dejar que su superioridad técnica fuera materia suficiente para contrarrestar a la voluntariosa formación francesa.

Sin alardes, el Manchester no dio en ningún momento la sensación de que peligrara su continuidad europea ante un conjunto francés que demostró que carece del nivel para afrontar este tipo de eliminatorias.

El Manchester se clasificó con dos jugadas aisladas, una en cada partido, que desequilibraron de su lado una balanza en la que ambos equipos pusieron muy poco.

Sabedores de que tenían el marcador en contra, los hombres de Alex Ferguson se esforzaron en calmar un partido que el Lille no logró animar en ningún momento.

Atascado el fútbol en el centro del campo, los ingleses se apoyaron en su técnica superior para generar las mejores jugadas. Al cuarto de hora Rooney dispuso de una buena ocasión y O'Shea estrelló un balón en el larguero.

Los franceses tardaron en reaccionar y cuando lo hicieron fue de forma demasiado mansa para unos octavos de final de la Liga de Campeones. Makoun disparó flojo a los 22 minutos, un espejismo antes de que el Manchester recuperara la manija del juego.

Sólo en los primeros compases del segundo tiempo pareció que el Lille podía sacar de sus casillas a la zaga inglesa, pero al equipo de Claude Puel le falta picardía.

El Manchester aguardó que madurara la fruta y en el minuto 72 recogió la recompensa de su paciencia. Ronaldo se internó por la banda izquierda, superó por velocidad a los defensores y colgó un fantástico balón que Larsson colocó en la red de Sylva.

El tanto inauguró la fiesta del Manchester y acabó con la poca resistencia francesa.

1- Manchester United: Van der Sar; Neville, Ferdinand, Vidic, Silvestre; Ronaldo (Richardson, m.82), Carrick, Scholes, O'Shea; Rooney (Park, m.82), Larsson (Smith, m.74)

0- Lille: Sylva; Chalmé, Tavlaridis, Plestan, Tafforeau; Keita, Dumont (Mirallas, m.74), Makoun, Obraniak, Bastos (Debuchy, m.46); Odemwingie (Fauvergue, m.74)

Gol: 1-0, m.72: Larsson

Árbitro: Luis Medina Cantalejo (ESP), amonestó a Ronaldo y Richardson entre los locales y a Makoun, Chalmé, Tafforeau, Plestan y Keita en los visitantes.

Incidencias: Partido de octavos de final de la Liga de Campeones disputado en Old Trafford ante unos 60.000 espectadores.