Santiago Cañizares, guardameta del Valencia, afirmó tras el partido frente al Inter de Milán que dio la clasificación a su equipo para cuartos de final de la Liga de Campeones, que nadie puede estar orgulloso de la pelea final y que "cuando acaba el partido deben acabar las hostilidades".

"La agresividad tiene que ser positiva y cuando pita el árbitro sobra todo lo demás y lo único que puedes hacer es saludar al rival e irte a casa", agregó el futbolista, que lamentó que se tuviera que hablar de ese incidente en vez de "los dos grandes partidos" que han hecho en esta eliminatoria.

El portero valencianista aseguró que no sabía cómo había empezado la pelea. "No sé lo que ha pasado ni quiero saberlo", afirmó Cañizares, que mostró su alegría por haber eliminado a "uno de los mejores equipos de Europa".

"El rival que yo quiero no está en el bombo. Son todos extraordinarios equipos y muy complicados. Si quieres ser el mejor de Europa tienes que ganar a los mejores de Europa. Nosotros estamos preparados para plantar cara a cualquiera pero tenemos un profundo respeto a todos los rivales", concluyó.