Lehmann despierta al Villarreal de su sueño más dulce.

Enviado por roberto el Mié, 26/04/2006 - 01:22

El guardameta alemán Jens Lehmann despertó al Villarreal de su sueño más dulce y le privó, con un penalti parado en el minuto 88 de partido al argentino Román Riquelme, de acceder a la final de la Liga de Campeones en la que si que estará el Arsenal (0-0) el próximo 17 de mayo en París.

El Arsenal se encomendó a su sistema defensivo a lo largo de todo el partido para, además de disputar la final de la máxima competición continental, encadenar su décimo partido sin recibir un gol. Todo un récord. Además, Lehmann adornó la estadística con un penalti parado a uno de los mejores especialistas.

Fueron los villarrealenses los que llevaron la batuta todo el partido, disfrutaron de las únicas ocasiones de gol del partido. Superó prácticamente en todo al Arsenal salvo en una cosa, pero la más importante: el marcador.

Las intenciones de ambos equipos se vieron desde el primer minuto. El Villarreal a la carga, pero mirando de reojo a su rival y el Arsenal a conservar el tesoro que en forma de gol había conseguido en la ida y apostado en busca de su mortal contragolpe.

Así, el equipo del francés asumió el papel que se preveía. Con un único punta -Thierry Henry-, cedió el balón a su rival, pero con la intención de largar algún balón arriba con el que algún cañonero pudiera torpedear al submarino amarillo.

Al igual que en la ida, Arsene Wenger dispuso de un centro del campo poblado con una misión clarísima: anular a Román Riquelme, sabedor de que controlado el comandante argentino las opciones de éxito de su rival descendían muchos enteros.

Al cuarto de hora, el Villarreal se había hecho con el partido. Con un dominio territorial total se fue en busca de ese gol que abriese el camino hacia la final de París, si bien las ocasiones claras de gol ante la meta del alemán Jens Lemann fueron escasas en esos momentos.

Hasta tres hombres cerraban el paso en casi cualquier acción de Riquelme, con el objetivo de no dejar pensar a la estrella argentina y, sobre todo, neutralizar su último pase mortal.

Perdida la ebullición inicial del equipo del chileno Manuel Pellegrini, apareció la figura del español Cesc Fabregas en el centro del campo de los gunners, bien acompañado en labores más grises por su escudero Gilberto Silva. El organizador catalán se echó el equipo a la espalda. Por él pasaban casi todos los balones del conjunto londinense y logró, en gran medida, desatascar el medio campo.

Sin embargo, cuando el partido se acercaba al intermedio el Villarreal se rehizo y llegaron las aproximaciones y ocasiones más claras de los locales a la portería inglesa. El Arsenal andaba algo dormido y ansiaba que sonase la campana cuanto antes ante las andanadas de su última hora de su rival, incluido un envenenado lanzamiento de falta directa de Riquelme.

La salida del Villarreal volvió a ser explosiva. El mexicano Guille Franco tuvo dos excelentes ocasiones de batir a Lehmann, pero en ambos casos, el primero de ellos antes de cumplirse el primer minuto del segundo periodo, salieron ajustadas a los palos.

El Villarreal de las grandes ocasiones estaba sobre el terreno de juego y se fue decidido al ataque. Pellegrini dio entrada a José Mari Romero por Josico para jugarse ya el todo por el todo ante un Arsenal que se había encomendado a su férreo y siempre ordenado sistema táctico.

Pero el equipo villarrealense volvió a perdonar a los 64 minutos de partido, en esta ocasión por mediación del uruguayo Diego Forlán, cuyo lanzamiento volvió a lamer el poste cuando medio estadio se disponía a cantar el primer gol local.

Al igual que sucedió en el primer tiempo, el Arsenal reapareció en el partido una vez serenado el fogoso juego villarrealense. Pertrechado en torno a Lehmann el Arsenal se defendía con todo y buscaba de paso una contra que pudiera culminar Henry, muy vigilado toda la noche por los centrales del Villarreal.

Pero el partido tuvo la emoción de las grandes citas hasta el final. El Villarreal dispuso de la opción de forzar la prórroga con un penalti cuya resolución enmudeció el estadio al detener Lehmann el lanzamiento de Riquelme. Era el minuto 88, y el sueño del Villarreal acabó, si bien, la gesta del submarino amarillo perdurará en el tiempo al codearse con los más grandes de Europa durante todo un año.

SÍNTESIS DEL PARTIDO:

Villarreal (0): Barbosa, Javi Venta, Peña, Quique Alvarez, Arruabarrena (Roger, m.81), Josico (José Mari, m.63), Senna, Riquelme, Sorín, Franco y Forlán.

Arsenal (0): Lehmann, Eboué, Touré, Campbell, Flamini (Clichy, m.9), Gilberto, Hleb, Cesc Fabregas, Ljungberg, Reyes (Pirés, m.69) y Henry.

ÁRBITRO: Valentin Ivanov (RUS). Sin tarjetas.

ESTADIO: Disputado en el estadio de El Madrigal ante 23000 espectadores. Terreno de juego en perfectas condiciones. Partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones.