Y así, con los dientes apretados, con altivez, liderazgo y solvencia, los “Ídolos” labraron una victoria llena de drama y solidaridad (1-0) ante un Mushuc Runa respondón, rápido y consistente. Cuando nadie lo esperaba surgió una figura joven de persistente marca y ritmo endemoniado: Johnny Quiñonez, quien apareció como figura estelar en el gol desperdiciado por Edson Montaño (penal errado a los 22 min) y en la  presencia fantasmagórica (48 minutos) para entregar la felicidad a los fieles de todos los domingos.

El “Papá” le tiene “pisado el poncho” al Mushuc Runa, porque de los tres partidos jugados, los ganó todos (4-1, 0-1 y 1-0) le hizo 6 goles y recibió apenas uno. Nueve puntos ganados. Éxito total.

“No podemos perder puntos. El cálculo es sacar cuatro puntos a cada uno. Jugaremos ida y vuelta y son los equipos con los que peleamos. Eso determinará nuestro futuro en las ocho fechas finales”, explicó Oswaldo Darío Tempesta el DT de los milagros en el equipo querido de Quito que hoy se coloca en el tercer lugar con 50 puntos; 45GF-39GC+6D.

Con esquema férreo y atrevido (3 centrales, 2 carrileros, 4 volantes y 1 delantero el “Papá” hizo respetar a la casa sagrada de los luchadores y humildes, de aquellos que llevan sus matracas y banderas para solo al final, mostrar el orgullo de los vencedores.

Aquel fútbol de fantasía (cuatro toques en el área- minuto 48) nos hizo recordar las épocas de grandeza, donde la transportación prolija del balón, era un argumento más de victoria. Empezó Lima, apareció Michael Jackson Quiñonez, alargó la jugada a Diego Palacios y con una velocidad desequilibrante y letal apretó Johnny Quiñonez para el alienante 1-0.

La sutilidad de Pablo Lima, el sobrio esquema defensivo donde Marcos del Padre fue el capo; los despliegues individuales de Michael Jackson Quiñonez, el reloj suizo de aquella tarde en la que se jugó para ganar, convirtiéndose en el mejor expositor de aquella versatilidad táctica sorprendente y eficaz, de un equipo que salió extenuado del campo, tras soportar en los minutos finales la reacción del equipo del “Ponchito”, con argumenta un crecimiento táctico.

Tras 31 jornadas, las imágenes sin ser extraordinarias, son alentadoras. Los “orientales” han sido capaces de ganar a los rivales directos, sin importar el espectáculo que proponen muchos, especialmente los francotiradores que aparecen gane o pierda, para desparramar en los escenarios un halo de odio y desgracia.

La metamorfosis del Ídolo ha sido lenta, pero segura. Tiene una sola debilidad hasta el momento: no consolida su rendimiento de visitante. El rato que gane dos o tres partidos en la costa, la personalidad está definida y los sueños se pueden hacer realidad. Y es importante recordar algo más: Este no es un campeonato de velocidad, sino de resistencia.

Los que lamentablemente no asistieron,  se perdieron el postre de la tarde. Fue al minuto 48, cuando todos los que saben jugar al fútbol tocaron en forma magistral, en aquel segundo de fantasía, iniciado por Lima, continuó Michael Jackson Quiñonez, alargó la jugada a Diego Palacios y con una velocidad desequilibrante y letal apretó Johnny Quiñonez para el alienante 1-0.

Pero además hubo otra, cuando Michael Jackson puso en callejón a Johnny Quiñonez que utilizó las virtudes de velocista llegando al área y cuando se disponía a convertir la primera (22 minutos) fue trabado en el área por Nazareno, decretándose el tiro penal que malogró en forma inusitada el goleador de Aucas, Edson Montaño.

Esta página de imaginación, derroche físico e inspiración, fue escrita como un homenaje a aquellos que siguen confiando en sus guerreros, aquellos que solo al final, compartieron el esfuerzo, con los que alentaron durante los 92 minutos y que se convirtieron en los autores del festejo interminable de una hinchada que apoyó al Ídolo campeón en forma conmovedora, sabiendo además que la presencia del colombiano Victor Soto, fue sinónimo de garantía en el arco.

FICHA TÉCNICA

SD Aucas. Victor Soto; Jefferson Hurtado, Diego Calderón y Marcos del Padre; Neicer Reasco y Diego Palacios; Michael Jackson Quiñonez, Pablo Lima, Johnny Quiñonez, Luis Machado y Edson Montaño.
Gol: Johnny Quiñonez (48 minutos)
Modificaciones: Juan José Govea por Luis Machado; Johan Cortez por MJ Quiñónez; Jairon Bonet por Edson Montaño.
DT: Osvaldo Darío Tempesta (argentino).

Mushuc Runa: Emiliano Olivero; Miguel Méndez, Aurelio Nazareno, Mauricio Santacruz, Giancarlo Zumba; Jamil Martínez, Darío Bone, Andrés Bone y Esteban Solís; Javier Quiñónez y Jackson Pita.
DT: Juan Carlos Garay (ecuatoriano).

Por: Gonzalo Melo Ruíz