Clásico sin favorito

Enviado por robert el Jue, 01/10/2015 - 12:12

Barcelona y Emelec se enfrentarán en el cuarto y último Clásico del Astillero del año bajo circunstancias que claramente son desfavorables para ambos. Los de Almada vienen de caer estrepitosamente ante el Deportivo Cuenca, equipo que está peleando en las últimas posiciones del torneo. Emelec, por su parte, acaba de ser eliminado en la Copa Sudamericana y llega a este cotejo, desde lo futbolístico, en un momento donde hay más dudas que certezas.

La derrota del último domingo cayó muy mal en el mundo Barcelona. Más allá de haber perdido por 3 goles de diferencia, la forma en que lo hizo generó desconfianza respecto a la calidad del plantel que tiene el conjunto guayaquileño. El segundo tiempo que ha jugado el Ídolo en el Alejandro Serrano Aguilar fue decepcionante. Algunos futbolistas están muy por debajo del nivel que alguna vez les conocimos.

La derrota ante el Deportivo Cuenca fue simplemente una demostración más de lo que el equipo de Guillermo Almada ha hecho en esta segunda etapa. Improvisaciones constantes y futbolistas que no se sienten cómodos con las funciones que les delegan en varias fases del juego. Brahian Alemán, por ejemplo, está pasando el peor momento desde que llegó al cuadro torero; un poco víctima de la forma en que trata de jugar su equipo y de su posicionamiento en el campo.

Del otro lado está Emelec, que también transita una etapa llena de incertidumbre. La eliminación de la Copa Sudamericana quizá signifique un golpe emocional muy grande para un plantel  que ha intentado llegar lejos en los torneos internacionales en los últimos años, pero que no termina de cuajar grandes presentaciones. En la noche de Bogotá ha desaprovechado una buena oportunidad frente a un rival que también venía golpeado.

Omar De Felippe no podrá contar con Miller Bolaños, su futbolista más desequilibrante. Mientras que en Barcelona regresará el uruguayo Alemán que, más allá de no pasar un gran momento, siempre será un punto a favor; más tomando en cuenta las limitaciones que tiene el cuadro comandado por Guillermo Almada en fase ofensiva.

El partido llega, curiosamente, en el peor momento de ambos. Barcelona y Emelec están emocionalmente golpeados y este cotejo puede significar un antes y un después para alguno de los dos. Clásico de mata o muere. Renacimiento o deceso. 

Por: Vito Muñoz Ugarte