Mostrando las secuelas de una triste presentación, aquella que  desencaja a cualquiera cuando viene un modesto rival, que le domina a placer, le toca de manera desconcertante y le convierte dos goles en 10 minutos, ahí viene la cruda realidad. Y pudo haber sido goleada si Armas convierte de penal.

Todo este desastre es producto del mal armaje del equipo. De contar con jugadores de “pecho frío”, que se esconden y evaden responsabilidades cuando el partido está caliente, cuando hay que poner fuego para equilibrar una ventaja técnica del rival. Osma armó el equipo, es el único culpable de esta pesadilla.

Cuando nadie lo esperaba, vino el modesto Técnico Universitario y le baila en su propia casa, con dos ataques fulminantes que dejaron en retro a los desconcertados zagueros (por izquierda Salazar y por derecha Reascos) que nunca atinaron al bloqueo preciso ni al anticipo adecuado, es decir, la calidad y concentración que deben tener en jugadas rápidas, se quedó en el camerino, donde generalmente se arman las jugadas de victoria.

Y aunque los malditos francotiradores que hoy están de plácemes ( por la derrota de Aucas) esperan otro traspié, es bueno decirles a jugadores y dirigentes que hoy más que nunca deben estar unidos, imponiendo o redoblando el concepto claro de sacrificio, consiguiendo definir una identidad futbolística, es decir, saber a qué se quiere jugar, y hacerlo. Ese es el anhelo ferviente de los auténticos hinchas de Aucas, aquellos que les dan ánimo en los momentos duros, cuando se pierde un partido sin historia y no piden la cabeza del entrenador con gritos destemplados y cobardes.

Ahora viene la gran pregunta. ¿ De continuar este drama, hasta cuando durarán jugadores y cuerpo técnico ?. Posiblemente una fecha más. Osma no tuvo ambición en el armaje. Al parecer el presupuesto le apretó tanto que agarró lo que pudo y lo que tiene es un equipo sin líderes ni ambiciones.

Técnico fue mandón y dominador. Las incursiones de Rodríguez, Armas y García eran como para ponerse a pensar en una goleada.

Pero el primero de Ensom Rodríguez (4 min) completamente solo en el corazón del área, dejó sin respiro al equipo, por la falla en la cobertura de un lateral sin historia ni antecedentes como José Salazar, que las vio cuadradas en los reiterados centros de Diego Armas. Fue una pesadilla. Menos mal que salió.

Y lo que fue peor, vino la segunda, tras espectacular contragolpe, que la inició Armas viendo el pique de Rodríguez (10 min) que dejó en retro al lateral Reascos y de zurda colocó el 2-0.

Golpeados psicológicamente por los dos sopapos en la cara, fue Michael Jackson Quiñonez( 78 min)  quien quiso levantar al equipo, con soberbio derechazo para acortar cifras.

Pero después de la alegría vino el nervio y no hubo mejoras. Una acción aislada de Gustavo Figueroa, que el juez de línea Roberto torres anuló por fuera de juego y nada más. Jimmy Delgado, en el horizontal y nada más. Los visitantes movieron el balón con propiedad y solvencia, ante la modorra de un equipo que salió insultado y con la cabeza gacha.

DIGNIDAD, POR SOBRE TODO

Deseamos fervientemente que el Aucas vigorice paso a paso su lucha, que no solo se basa en la entrega de sus jugadores, sino que supere la parsimonia y el conformismo del no descenso, para convertirlo en dignidad. Y si a ese elemento intangible, pero decisivo a la hora de la verdad, sumamos una gran preparación física y mental, asimilando estrategias y tácticas, solamente ahí sabremos, cuáles serán los propósitos para el año 2017.

Los jugadores deben comprender que cuando viene la marca a presión y los contrastes, debe salir la inspiración como arma para el desequilibrio. Es decir, ahí deben asomar los laterales, volantes, e incluso la solidaridad de los delanteros, que poniéndose el overol, sean los auténticos obreros de la victoria, marcando, asfixiando y derrochando entusiasmo y calidad.

Entonces, el esfuerzo de todos, sepultará cualquier duda que se presente en el interior de un grupo donde todo es ilusión, intensidad, ideas, espíritu de cuerpo y de lucha, juego aplomado, sin sonrisas, donde la prolija dignidad, sin rechazos alocados, sin pescar a río revuelto, se convierta en la demostración de habilidad, diafanidad deportiva y fervor de todo un pueblo noble y apoyador como el auquista.

Si pone corazón y convicción, Aucas podrá mostrar que el fútbol espiritual y práctico que tiene, será el que predomine hasta el final. Es decir, Aucas que tiene jugadores modestos, debe imponer su ritmo y precisión, debe contar con jugadores que tengan sangre en la cara, que sientan una camiseta que tiene gloria y tradición. Los que no piensen así, con honestidad, deberían retirarse lo más pronto posible.

FICHA TECNICA

S.D.AUCAS. Víctor Soto; Néicer Reascos, Hans Viveros, Marcos del Padre; José Salazar; Onofre Mejía, Diego Palacios, Fredy Araujo y Janus Vivar; J.J.Govea y Michael Jackson Quiñonez.
Cambios: De La Torre x Salazar; Figueroa x Govea y Merchán x Mejía.
Tarjetas amarillas: Brian De la Torre (47 min) y Marcos del Padre (92 min).
Gol: Michael Jackson Quiñonez  (78 min)
DT: Armando Osma (colombiano)

T.UNIVERSITARIO. Jorge Chena; Eder Moscoso, William Córdova, Jonathan Cobo; Jonathan Carabalí, Enson Rodríguez, Diego Armas, Charles Vélez; Ronaldo Tello, Francisco García y Fernando Mora.
Goles: Enzom Rodríguez (4 y 10 minutos)
DT: Patricio Hurtado (ecuatoriano).

Asistencia: 2.606 aficionados
Recaudación: $11.502

Por: Gonzalo Melo Ruíz