¡Vuelve el campeonato, vuelve la esperanza!

Enviado por robert el Jue, 28/04/2016 - 12:55

El fútbol ecuatoriano se viene encargando de ofrecer un producto entretenido, con competitividad, con pasión. Es por ello que esta espera de 20 días nos ha tenido intranquilos, como si algo nos faltase.
 
La pelota esperó, ayudó en lo que pudo y desde donde pudo. Sus dóminos mostraron su solidaridad y aprovecharon la facilidad que tienen para mover masas a favor de los que más lo necesitan, sin embargo llegó la hora que vuelva a rodar.
 
Los 20 días de paralizaron del torneo nos tenían a todos así literalmente: parados; faltos de emociones. Como lo había dicho en mi anterior columna, el fútbol suele ser un canalizador de alegría cuando de revertir situaciones se trata y acá esto es tal cual.
 
Dicen que el freno de las actividades futboleras les quita ritmo a sus jugadores asimismo creo que ese tiempo sirve para que cada competidor recargue energías y vuelva con una ferocidad inquebrantable. Es ahora donde se verá la sangría permanente de los futbolistas que tienen la obligación de defender sus escudos.
 
El líder Barcelona, el ambicioso Emelec, el pujante Independiente y el aguerrido El Nacional, tendrán cinco partidos antes de la nueva paralización por Copa América para revalidar todo lo que han mostrado en las once fechas anteriores y así seguir en la pelea por ganar el primer lugar de esta etapa. Estos equipos son los llamados a devolverles esa esperanza a tantos ecuatorianos que se refugiarán en el fútbol luego de tanta adversidad.

Un duelo en Casa Blanca entre el puntero y Liga de Quito y un Clásico del Astillero son dos botones que nos muestran que tendremos fútbol en los próximos 20 días donde se jugarán 27 partidos.
 
El equipo de Guillermo Almada  con un fútbol más sólido y solvente se pone la cinta de gran candidato. Si la fortuna está de su lado, no se le lesionan sus futbolistas y vence a sus rivales directos, -además de ganar en Ponciano-, tiene todo para ir en busca del boleto a la final del campeonato. Mientras que del otro lado del charco está el linajudo conjunto de Omar de Felippe que lucha contra sus propios fantasmas por consolidarse como uno de los aspirantes.
 
Independiente es un punto y aparte. Los de Pablo Repetto le apuestan a que su juventud ‘eterna’ finalmente dé ese gran salto de calidad en terrenos nacionales e internacionales y, por ahora va por buen camino.

Es una mezcla emociones que agita a todo un país.  Ahora viene lo más difícil y también lo más lindo. Vuelve el campeonato, vuelve la esperanza. 

Por: Vito Muñoz Ugarte