En todas las actividades de la vida, el ser humano tiene que pensar en lo que significa su actuación, para poder dejar algo para el futuro, conociendo todos, que nada es permanente, siendo –eso sí- muy importante, dejar para la posteridad algo que uno pudo haber hecho, durante su vida, para que recuerden en algún momento sus familiares –sobre todo los más pequeños- y amigos, un nombre especial o un hecho fundamental. Por ello, el tema que voy a tratar en esta ocasión, se refiere a algo que espero que llegue a ser parte de la historia y, bajo ningún concepto, lo político o baladí pues, del fondo que tengan estos recuerdos, dependerá el puesto que ese nombre, cosa o actividad, ocupe en el historial que siempre existirá.

Por lo tanto, creo que el tema que tanto nos apasiona como es ese maravilloso deporte llamado fútbol, es algo que podemos desmenuzarlo, positivamente, tratando de destacar lo bueno que se ha hecho y, lamentablemente, también lo malo, para buscar medidas que se deban tomar, para poder llevar siempre adelante al balompié rentado ecuatoriano. El 2014 ha sido un año con muchas situaciones contradictorias. Seguramente, por ser el año del mundial en Brasil que lo ganó Alemania o, talvez, porque al comienzo del próximo año, son las elecciones en los organismos que rigen el fútbol profesional en todo el mundo, ya que, no solamente serán elecciones de los países donde se juega al fútbol profesional,  sino también, en los organismos continentales y, lo que es más, en la propia FIFA.

Durante el último período de los dirigentes de la FEF, se ha podido observar una serie de antagonismos entre los directivos de la federación y, los de algunos clubes. No hubo problemas en lo que se refiere al tipo del campeonato, ya que, en la mayoría todos estuvieron de acuerdo, por el interés en casi todo el año que este mantenía. Comenzaron los problemas cuando se puso en el tapete el tema de las trasmisiones de los partidos a través de la televisión, y eso, arrancó cuando se perdió la libertad para que cada club, pudiera llevar adelante los contratos con televisoras particulares pues, varios de los clubes podían haber conseguido mejores valores y, con el dinero al comienzo del año -cuando más se necesita- para poder armar en mejor forma los equipos. Y, además, porque con los “paquetes” del fútbol, la “comodidad” de los llamados aficionados, ya no hay quien asista a los escenarios deportivos, generando de esta manera, no solo la falta de dinero por las entradas sino porque a los jugadores –en varios casos- les toca jugar ante cemento y nada más que cemento. (?) Esto se debe, a que en lugar de mantener, lo que se hacía antes, permiten mirar los partidos en todo el país, incluyendo, en las ciudades donde se juegan los encuentros. Por lo menos eso, debió tomarse en cuenta. Pero no, primero es sobresalir y, luego dejar que los dirigentes de los clubes, “vean que hacen para pagar a los jugadores de sus clubes”.

Pese a que el presidente de la FEF ha manifestado que no ha existido crisis en el fútbol profesional ecuatoriano, todavía este día, los directivos de equipos como la Liga de Loja, Deportivo Quito y Nacional –para dar un ejemplo-, están creando “fórmulas mágicas” para poder salir adelante. Mientras que, los jugadores fueron al paro pero, al parecer, los arreglos finales no fueron los suficientemente buenos, porque al poco tiempo, muchos de los directivos y jugadores, vuelen a hablar de la crisis económica en el fútbol rentado del país. En otras palabras, se continúa con los mismos problemas y, lo peor, estos pueden ampliarse, hasta que no haya una forma de detenerlos.

Un conocido dirigente honorario de Liga Deportiva Universitaria de Quito, equipo qué más éxitos le ha dado al fútbol ecuatoriano como es el señor Rodrigo Paz, pese a que es un hombre de la tercera edad, ha sido demandado por la “FEF” en forma penal, porque a los dirigentes de la FEF, no ha habido que “pedirles cuentas”, ya que eso es lo que se conoce de parte de los universitarios; en cambio, los de la FEF, dicen que han habido “calumnias” ¿Quién tendrá razón?, vaya usted a saber. Y, mientras eso ocurre en el plano legal, a su hijo, el sí dirigente de Liga Deportiva Universitaria, se le ha abierto un expediente –por igual motivo que a su padre- pero, para ser juzgado y –seguramente- sancionado, por la Comisión de Disciplina de la FEF.

En otras palabras, quienes mejor han estado realizando las cosas frente a un equipo profesional de fútbol, en lugar de felicitarlos, hay que darles con todo. ¿Son las personas, más importantes que el fútbol profesional ecuatoriano? La respuesta, seguramente, tendrá que buscarla cada uno de los aficionados a este maravilloso deporte que tanto apasiona en el mundo entero. Sin embargo, yo me pregunto también, ¿dónde está el diálogo que, según grandes pensadores, es lo único que puede hacer que las cosas cambien pero, positivamente?

En igual forma, ¿cómo podemos pedir que jugadores destacados, no solo en el país sino en varios lugares del mundo futbolístico, como el caso de Antonio Valencia y Michael Arroyo, formen parte del combinado nacional, si son “los culpables del fracaso del seleccionado en el mundial Brasil 2014”?

Por lo mismo, mi opinión en esta ocasión, vuelve a reeditar en lo que siempre afirmo, por lo que escucho a lo largo y ancho de mi querido Ecuador, que es necesario reestructurar la FEF, para que sean los equipos participantes en el campeonato ecuatoriano de primera categoría los que lleven adelante el mismo, y no, las asociaciones que, muchas de ellas ni siquiera tienen equipos en esa categoría profesional de fútbol. Señores dirigentes, al estar a cuatro meses para terminar el año 2014, pensemos un poco más en el fútbol, que es lo único que perdurará durante muchos años, cuando ya –posiblemente- ninguno de nosotros, esté en el mundo de los vivos.

Por: Jorge García Romo