¡Un semestre para mejorar el fútbol!

Enviado por robert el Mar, 29/07/2014 - 17:14

Se ha colocado un parche y se ha eliminado, momentáneamente, la crisis en el fútbol profesional. Se ha realizado una larga reunión entre los directivos de la FEF y los de la AFE, teniendo como testigos de honor, a los señores ministros del Deporte y de Relaciones Laborales. Luego, la presencia de los principales de la FEF y de la AFE en la Asamblea Nacional pues, bien dice el viejo dicho “cuando el río suena, piedra trae”; y, por ello, hasta los asambleístas a los que no les conocen ni los guardias del palacio legislativo, han tratado de sobresalir públicamente. Sin embargo, analizando fríamente, de lo que se trató en realidad, fue un problema laboral de los clubes con sus jugadores, por un asunto de sueldos impagos y, donde a la FEF, lo único que incumplió, fue la realización de un control directo y estricto, de acuerdo a lo que establecen algunos articulados de su Estatuto.

 

Para poder salir -en realidad- de la crisis anotada, se tiene un semestre por delante, para que, los directivos de los clubes del fútbol profesional, puedan dar forma a una reestructuración general de la FEF, en beneficio del fútbol profesional ecuatoriano. No se trata, bajo ningún punto de vista, de buscar culpables pues, si el trabajo va en ese sentido, nunca dejará de tener los vicios estructurales el balompié rentado en el país.

 

Siguiendo los buenos ejemplos de otros países con un fútbol rentado mejor organizado, lo primero que se debería hacer, es encontrar la salida legal, para que exista un organismo solo de fútbol profesional y, para ello, es necesario darle un vuelco a lo existente y, hacer que el fútbol amateur se lo maneje aparte. Para ello, es necesario establecer primero, quienes forman parte de ese fútbol profesional. Para mí, deberían integrar este organismo, los 12 clubes de la primera categoría o lo que llaman la Serie A. No creo que se deba ampliar ese número, considerando lo pequeño que es el país. En igual forma, los 12 equipos de la segunda categoría o lo que llaman la Serie B. Y, habría que analizar mucho, si deberían incluirse los clubes de la tercera categoría o lo que llaman segunda categoría nacional pues, aquí estamos hablando de un elevado número de equipos en todo el país. Posiblemente, se deberían hacer torneos provinciales, para clasificar a uno o dos equipos por cada provincia para esta categoría, también de fútbol profesional. Eso sí, con las condiciones especiales de esa categoría, para que los jugadores sean menores de 20 años y solo jugadores nacionales, exclusivamente. (Como ejemplo, nada más).

 

Si cada equipo profesional tiene un número perfectamente determinado de votos por su categoría, entre ellos, se debería formar una directiva, donde debería existir un presidente, un vicepresidente, un tesorero, un secretario, un síndico y, tres vocales principales y tres suplentes (también es un ejemplo). Pero, son los clubes participantes, quienes manejarían el torneo y no las asociaciones que, en la mayoría de los casos, no tienen ni siquiera fútbol profesional.

 

Sin embargo, es muy importante establecer, que para que todo esto funcione como se desearía, lo primero que deberían hacer es sanear a los clubes que van a participar en el torneo ecuatoriano en cada categoría y, dictar un reglamento “a raja tabla”, como se dice vulgarmente, para que quienes dirijan los equipos profesionales, tengan claro lo que deben y lo que no deben hacer, para evitar este tipo de problemas que, aunque a muchos no les parezca, es una crisis de la que tenemos que salir adelante pero, positivamente. Aquí recuerdo una frase de ese genio de comienzo del siglo pasado Albert Einstein, cuando dijo “las crisis son importantes para las personas y los países pues, de ellos siempre tiene que salir el progreso”.

 

Me alegro que los jugadores hayan conseguido, por lo menos, el primer punto de los planteados por los agremiados pero, si no se da paso al cambio estructural, que espero haber podido delinearlo en este comentario como mi opinión, el próximo año se continuará con los mismos problemas de hasta hoy día y, en poco tiempo, pueden ser todavía mucho más graves. Confiemos que quienes lean estas palabras comprendan que se trata de hacer ahora o nunca un cambio en las estructuras del fútbol ecuatoriano, porque todos los aficionados del país, creo que buscamos lo mismo, lo mejor para un futuro mediático. Y, por favor, no olvidarse de la inversión en las divisiones menores, que son el verdadero futuro del balompié rentado nacional.

 

Por: Jorge García Romo